El número de desaparecidos en el estado norteamericano de California a causa de los incendios se duplicó y ya llega a los 631, según informaron las autoridades locales, que ayer hallaron siete cadáveres más.
Varios focos se encuentran activos en esta región.
El incendio, el más letal de todos los registrados en la zona, acabó con la vida de al menos 63 personas.
Comenzó a arder hace ocho días y barrió velozmente una franja al norte, dejando muy poco tiempo a los residentes para escapar. Casi 12.000 inmuebles quedaron destruidos.
“Quiero que entiendan que el caos con el que lidiamos fue extraordinario” cuando el fuego empezó, explicó a periodistas el sheriff del condado de Butte, Kory Honea, al intentar justificar la extensa cifra de desaparecidos.
Zona devastada
El departamento de bomberos de California dijo que el Camp Fire (como se denominó al fenómeno), también el incendio más destructivo registrado en el estado, acabó con 56.655 hectáreas y ha sido contenido en un 40%.
Añadió que cerca de 5.500 bomberos están luchando contra las llamas y que no esperan que esté totalmente controlado por otras dos semanas.
En tanto, el otro foco de incendio denominado Woolsey Fire hizo arder 39.660 hectáreas y está contenido en un 62%. Se espera que sea extinguido antes del lunes.
Las autoridades aseguraron que las temperaturas más frescas y los vientos más suaves han traído un poco de consuelo a los bomberos.
Varias celebridades perdieron sus residencias en Malibú como resultado de ese incendio, incluidos Pierce Brosnan, Miley Cyrus, Neil Young, Robin Thicke, Shannen Doherty y Gerard Butler.
El gobernador de California, Jerry Brown declaró: “Esto es tan devastador que no tengo palabras para describirlo. Parece una zona de guerra”.
Aún no está claro cuándo podrán retornar a la ciudad los residentes.
Denuncian a compañía
El origen de los incendios está aún en investigación. Muchas víctimas lanzaron una querella colectiva en San Francisco contra la compañía local de electricidad Pacific Gas & Electricity (PG&E).
Según la denuncia del abogado Mike Danko, que representa a 20 víctimas del Camp Fire, el incendio pudo haber sido causado por las “chispas de soldadura” sobre una línea de alta tensión de esa compañía.
Una portavoz de PG&E desmintió toda responsabilidad de la empresa. La compañía fue encontrada culpable de otros devastadores incendios que dejaron 15 muertos en California en el pasado otoño boreal.
Muchas de las víctimas y de los desaparecidos en el Camp Fire eran personas ancianas que vivían en la ciudad de Paradise, ubicada en el condado de Butte, a los pies de las montañas de la Sierra Nevada. Y se cree que no pudieron huir a las llamas o que fueron alcanzadas por el fuego mientras huían en sus vehículos.
Es posible que algunas de las personas en la lista de desaparecidos estén refugiadas con familiares o amigos pero muchas otras pudieron haber muerto en el incendio. Por lo que se espera que el número siga fluctuando.
Investigadores tomaron muestras de ADN de familiares para ayudar a identificar víctimas, mientras cientos de efectivos y perros rastreadores trabajaban para localizar más restos humanos.
Prácticamente cada una de las casas en Paradise quedó destruida por el incendio, que fue alimentado por fuertes vientos.