Los cinco presidenciables del Frente Amplio Unen (FAU) buscaron volver a dar muestras de unidad interna y se pronunciaron ayer sobre la realidad nacional con un mensaje en el que pidieron “responsabilidad” a la dirigencia para no fogonear situaciones de violencia.
Además, exigieron que se convoque al Acuerdo de Seguridad Democrática y al Consejo Económico y Social.
El socialista Hermes Binner, los radicales Julio Cobos y Ernesto Sanz, Fernando “Pino” Solanas, de Proyecto Sur, y la líder de la Coalición Cívica-ARI, Elisa Carrió, dejaron de lado sus diferencias internas y compartieron otra vez un mismo escenario, luego de los chispazos de los últimos meses por la posibilidad o no de un acuerdo electoral con el PRO.
Los discursos, que no superaron los cinco minutos cada uno, estuvieron enfocados, básicamente, hacia la inflación y la inseguridad, y todos ellos coincidieron en la necesidad de convocar al Acuerdo de Seguridad Democrática, firmado en el 2009 por una vasta alianza multisectorial y multipartidaria que objeta las respuestas autoritarias a problemáticas de inseguridad y propone criterios básicos para la acción democrática del Estado frente al delito.
También hubo un pedido explícito de parte de Carrió y Binner a la sociedad y a la dirigencia para sumarse a un “principio de cooperación” de respaldo a las pymes y para tomar distancia de quienes fogonean la “violencia”.
“Hay una situación conflictiva muy grave producto de irresponsables que piensan que se puede apagar el incendio echando más nafta al fuego”, declaró Binner y resaltó que el frente Unen “no sólo tiene críticas al gobierno sino también propuestas”.
Con tono serio y esta vez sin chicanas a ninguno de sus compañeros, Carrió llamó a la ciudadanía a no “cargarse de violencia” y a apoyar a los pequeños productores, en beneficio de “todos” y aunque eso signifique “pagar un poco más”.
“Somos la garantía de una transición democrática y republicana, sobre todo frente a los atropellos que está produciendo el gobierno en las instituciones de la República y también otros sectores del PJ”, planteó Carrió.
En la conferencia de prensa conjunta que los cinco ofrecieron en un hotel del barrio porteño de Congreso, la única alusión directa al macrismo estuvo en boca de Sanz, quien le endilgó al PRO ser “funcional al kirchnerismo” y le exigió que “baje” su candidato para la elección del abogado del interior del país que ocupará un lugar en el Consejo de la Magistratura. La elección de los representantes de los abogados del interior está prevista para el 29 de septiembre próximo y Mauricio Macri, a diferencia del resto de la oposición, respalda para ese puesto a Adolfo Alvarado Velloso.
“Hay un intento de copamiento del Consejo de la Magistratura y por eso exhortamos a los abogados del interior a que participen y voten a los abogados que garanticen la justicia y la independencia y que apoyen al candidato que respalda Unen, Miguel Piedecasas”, expresó Sanz.
Para Cobos, también, en la elección de los cargos para el Consejo de la Magistratura “se juega el destino y el futuro” de cuestiones clave para el país.
“Tenemos un Estado que gasta mal y mucho más de lo que ingresa. El gasto está creciendo cerca del 50 por ciento y la recaudación, el 30. Hay algunas luces verdaderamente preocupantes. En el último mes el IVA ha crecido nada más que el 28 por ciento. Es decir que ya la caída del consumo no compensa ni siquiera la gran inflación que estamos teniendo”, planteó Cobos.
También Pino Solanas cuestionó la previsión de gastos e ingresos para el año próximo presentada por el gobierno: “Tenemos cerca de 200 mil despidos, la producción industrial cayendo acentuadamente, una inflación que será del 40 o arriba del 40 por ciento y, frente a eso, el gobierno responde con una provocación: un presupuesto nacional absolutamente dibujado”, advirtió.