Batalla táctica, compromiso físico y rivalidad histórica alimentan el Inglaterra-Escocia, un clásico del rugby europeo que se disputará por primera vez en terreno neutral, en el Eden Park de Auckland, con una plaza en cuartos de final del Mundial en juego. El resultado de este encuentro es trascendental para la clasificación de Los Pumas a la siguiente fase.
Con una lluvia y climatología propias de Gran Bretaña anunciadas para este clásico, Escocia e Inglaterra disputarán un partido a vida o muerte. En 128 partidos oficiales disputados desde 1871, los dos equipos nunca de han enfrentado fuera de la isla. Sólo se midieron una vez en un Mundial, el 26 de octubre de 1991 en el estadio Murrayfield de Edimburgo, en una semifinal ganada por los ingleses (9-6). Veinte años más tarde, los dos equipos se disputarán una plaza en cuartos de final.
Los escoceses están en una situación más delicada tras su derrota (13-12) frente a Argentina con un try agónico a siete minutos del final. Sólo una victoria con punto bonus –y sin bonus para los ingleses– les asegurará una plaza en cuartos. Cualquier otro resultado pone en peligro su pase a la siguiente ronda por primera vez en su historia. El XV de la Rosa, líder invicto del Grupo B, debe imponerse para conservar su primera plaza, sinónimo de un cuarto de final contra Francia en lugar de frente a los All Blacks.
El partido anuncia una ruda batalla entre dos packs prácticamente al completo ya que faltará sólo el octavo escocés Kelly Brown, lesionado, y su homólogo inglés Nick Easter, que estará en el banco tras volver de su lesión. El objetivo es claro para los dos equipos: hacerse con el balón, guardarlo y responder en los enfrentamientos físicos, que se anuncian feroces.
En el equipo inglés, el segunda línea Courtney Lawes regresa tras haber purgado dos partidos de suspensión por un rodillazo al hooker argentino Mario Ledesma en el primer partido, y estará asociado a Louis Deacon.
Formaciones:
Inglaterra: Ben Foden; Chris Ashton, Manu Tuilagi, Mike Tindall, Delon Armitage; Jonny Wilkinson, Ben Youngs; James Haskell, Lewis Moody (capitán), Tom Croft; Courtney Lawes, Louis Deacon; Dan Cole, Steve Thompson, Matt Stevens. Reemplazantes: Dylan Hartley, Alex Corbisiero, Tom Palmer, Nick Easter, Richard Wigglesworth, Toby Flood, Matt Banahan.
Escocia: Chris Paterson; Max Evans, Joe Ansbro, Sean Lamont, Simon Danielli; Ruaridh Jackson, Mike Blair; Richie Vernon, John Barclay, Ally Strokosch; Alastair Kellock (capitán), Richie Gray; Euan Murray, Ross Ford, Allan Jacobsen. Reemplazantes: Scott Lawson, Alasdair Dickinson, Nathan Hines, Ross Rennie, Chris Cusiter, Dan Parks, Nick de Luca.
Árbitro: Craig Joubert (RSA).