Miami se posiciona como una de las ciudades más importantes del mundo en materia inmobiliaria, con casi 300 nuevos proyectos de lujo que atraen a inversionistas de todo el mundo. Pero la Argentina no parece formar parte de este fenómeno, como hasta hace poco tiempo, ya que según los especialistas en los últimos cinco años cayeron más de un 50% los compradores argentinos.
«No es un porcentaje muy grande, se trata de un público exclusivo. Cuando no existían las trabas para comprar dólares hablábamos de entre un 15% y un 20% de inversores argentinos; hoy es de entre el 5 y el 10%», explicó a Ámbito Financiero Gustavo Leone, asesor de inversiones en Miami.
Con un dólar «blue» que asciende a los $ 12,6 y los precios de los inmuebles estadounidenses que se han incrementado en los últimos tres años hasta un 100%, se genera un nuevo escenario: «Hay interesados, pero pocos compradores que consiguen un retorno que oscila entre el 12% y el 15% una vez finalizada la construcción», explica Leone.
En 2009 la burbuja inmobiliaria explotó y tuvo como epicentro a la ciudad de Miami. Eso hizo que rápidamente cayeran los precios de los inmuebles, situación que aprovecharon miles de latinoamericanos. Desde 2005 se había hecho una fuerte inversión en construcción, y en 2009, en plena crisis, hubo 20 mil condominios finalizados, pero sin habitar. Hoy ese número es historia y las construcciones crecen a pasos agigantados.
«Es una realidad que hay una baja de compradores argentinos y esto es por la situación política y económica que está atravesando el país», agrega Jorge Kupferman, bróker de Miami Life Realty. «Las propiedades siguen revalorizándose, tienen entre un 20 y un 30% de rentabilidad en dólares», indicó. Pero es justamente el incremento de los precios en esa ciudad de Estados Unidos lo que parece alejar a los argentinos.
«Hace cinco años era más fácil comprar en Miami porque la divisa estadounidense era más accesible. Hoy los precios se incrementaron y las nuevas propiedades son de lujo, lo que limita el universo de los compradores», concluyó Kupferman. El 50% de los inversores, sólo tres años atrás, era latinoamericano. Los principales jugadores eran Brasil, Venezuela y la Argentina; hoy toman más protagonismo los europeos, con Rusia a la cabeza, y los asiáticos parecen haber depositado sus ojos en Miami. China encabeza la lista.
Si bien hay un público de argentinos que aún se vuelca hacia los inmuebles usados, ese número se ha achicado. Hoy se puede conseguir una propiedad por u$s 2.000 el m2. El caso de los pozos dejó de ser atractivo por el simple hecho de que sus precios se han incrementado hasta un 100%. Invertir en esta modalidad significa un desembolso de u$s 4.000 por m2, mientras que los desarrollos más nuevos y frente a la playa llegan a los u$s 15.000, con un promedio de $ 12.500.
