La iniciativa comenzó con la campaña publicitaria en televisión que reza “separar nos une” y ayer se lanzó oficialmente de la mano de la intendenta Mónica Fein. Las islas ya conocidas de tres contenedores para el reciclado de residuos dejarán de operar de esa manera y desde ahora se usarán sólo dos contenedores (separados en lo reciclable y lo no recuperable). Habrá más islas para reciclar y todo tiene por objetivo adecuar la conducta de la ciudadanía para el destino final de los residuos: la planta de compostaje que se construye en Bella Vista, avenida Presidente Perón al 8000.
“La ciudad genera unas 800 toneladas de residuos domiciliarios por día, de los cuales sólo el 30 por ciento se recupera, si separamos, la recuperación podrá ser mayor. Rosario tiene todo para aspirar a ser una ciudad sustentable”, afirmó Pablo Seghezzo, secretario de Servicios Públicos y Medio Ambiente.
A su vez, Fein remarcó: “El cambio climático ya terminó con la vida de miles de personas en todo el mundo. Es hora de que tomemos la responsabilidad de hacer algo con nuestros residuos, de no enterrarlos y contaminar, sino recuperarlos, y es una labor que comienza desde casa. Tratemos de que nuestros niños y nuestros jóvenes sepan de la importancia que tiene el recupero para poder tener un mundo mejor hacia las próximas generaciones”. Al mismo tiempo, defendió la separación de residuos también por la posibilidad que le brinda a otras familias poder vender el material y así subsistir. “Acá tenemos dos cuestiones por las cuales separar: la social y la construcción del futuro de las próximas generaciones”, dijo la mandataria.
El programa Separe es uno de los proyectos más ambiciosos del Ejecutivo local de cara al año entrante, que prevé modificar e incrementar las islas con contenedores de separación, aumentar la inversión en torno a la materia de separación de residuos, redoblar los planes de educación ambiental y profundizar la concientización ciudadana.
Asimismo, las modificaciones se realizan con vistas a adoptar nuevas estrategias con miras a la Planta de Compostaje y Separación, que ya comenzó a construirse en un predio de casi 4 hectáreas en Bella Vista y que estará finalizada para el próximo año.
“Para esta planta hemos invertido unos 14 millones de pesos y nos permitirá recuperar los residuos sin la necesidad de separarlos entre papel, vidrio o metal. Por eso hoy quitamos el tercer contenedor y dividimos las islas en sólo dos: el verde para aquellos que no se puede recuperar (que incluye envases con residuos u otro material sucio) y los anaranjados que recibirán todo aquello que pueda recuperarse (vidrio, metal, plástico, telgopor, cartón, papel, siempre que estén limpios y secos).
Más islas
“Desde este lanzamiento, y hacia fin de año, la ciudad pasará de tener 140 islas a unas 350, además de tenerlas más cerca. De tener una isla cada 200 y 300 metros pasaremos a tenerlas cada cien metros gracias a la adquisición, también, de unos nuevos 100 contenedores”, explicó Seghezzo.
El circuito que comenzó a ver el cambio desde ayer, es el comprendido entre Oroño, Pellegrini y el río. En los próximos días el resto de la ciudad tendrá sus nuevas islas de reciclado.