Este jueves la Lepra está de fiesta. Hace 15 años Newell’s se consagraba campeón del Apertura 2004 a pesar de perder 2-0 con Independiente. Aquel domingo en Avellaneda fue el famoso de los 40 mil de visitante, marca registrada por el pueblo leproso más allá de las polémicas. En esa última fecha del torneo el equipo de Américo Gallego tuvo el apoyo de una multitud que se trasladó a Buenos Aires de cualquier manera. El objetivo era estar, no importaba el cómo.
Newell’s llegaba a Avellaneda como único líder de un torneo que tuvo un nivel mediocre. Vélez, que recibía a Arsenal, estaba a tres puntos del Rojinegro. Independiente no se jugaba nada, solamente el honor.
Desde Liniers llegaban buenas noticias. Gastón Sessa, arquero de Vélez, se mandó una chambonada y Santiago Hirsig marcó la apertura del marcador para Arsenal. Más tarde, el colombiano Jairo Castillo adelantaba a Independiente. Y en el Amafitani, un ex Newell’s, Fabricio Fuentes empataba para Vélez. Todo pasó en quince minutos. Esos resultados mantenían a la Lepra en lo más alto.
Ya con ambos partidos en el complemento lo único que pasó fue que Independiente aumentó la ventaja a través de Federico Insúa. En Liniers todo siguió igual, Vélez no pudo con Arsenal y Newell’s logró otro título más a su rica historia deportiva. Fue algarabía total en suelo ajeno.
Con el fútbol de Ariel Ortega, un grupo de jóvenes promesas y varios experimentados en el plantel el equipo del Parque Independencia consiguió una estrella más.
Américo Gallego fue el gran hacedor del nuevo galardón de los rojinegros. Se encontró con un plantel donde prevaleció la juventud y que lo fue delineando especialmente luego de la llegada del Burrito Ortega. También contó con jugadores con mucho rodaje como Ariel Zapata, Rubén Capria o Julián Maidana. La sobriedad en el arco del paraguayo Justo Villar y la desfachatez de pibes que hacían sus primeros pasos como Fernando Belluschi, Guillermo Marino o Ignacio Scocco.
Para recordar esa fecha tan gloriosa para la historia rojinegra algunos integrantes de aquel equipo del Tolo Gallego jugaron ayer un picadito en el Coloso.
El encuentro fue impulsado por una empresa rosarina de distribución de bebidas, que alquiló la cancha para un evento de despedida de año donde fueron invitados los futbolistas campeones del Apertura 2004.
Bajo un intenso calor, dijeron presente y despuntaron el vicio en el Coloso: Justo Villar, Germán Ré, Luciano Vella, Ariel Rosada, Rubén Capria, Ariel Zapata, Ivan Borghello, Julián Maidana, Damián Manso y Ariel Ortega. Un lujo para una mañana llena de campeones en el Parque.