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Intendente bonaerense busca cobrar el impuesto «alfajor Jorgito» a grandes campos: $35 por hectárea

Pablo Torres, intendente de Laprida, busca que los grandes productores y las empresas que no tengan capitales locales, abonen una tasa por única vez (que equivale a un alfajor simple). Los fondos se destinarán a un "pago estímulo" para trabajadores esenciales. Lógico, se opuso la Sociedad Rural

La pandemia puso en problemas a los diferentes gobiernos. Tanto los locales, como provinciales y el nacional, vieron caer sus recaudaciones producto de los problemas que están atravesando tanto los ciudadanos como las empresas, pero al mismo tiempo necesitan disponer de más recursos para enfrentar los distintos desafíos que surgen de la pandemia y asistir a esos mismos sectores en crisis. Es por ello que las distintas administraciones comenzaron a pensar de qué manera obtener más fondos sin afectar a aquellos que están atravesando por una situación delicada. Mientras que la Nación debate el aporte solidario de las grandes fortunas, en Laprida, un partido del centro sur bonaerense, anunciaron la tasa «alfajor Jorgito» destinada a los productores rurales de más de 400 hectáreas y a las grandes empresas cuyos capitales no sean locales. El gravamen, que equivale a 35 pesos, lo que sale la versión simple de la popular golosina, será destinado como un «pago estímulo» al personal municipal por su «esfuerzo y compromiso» durante la cuarentena.

«Anunciamos un pago estímulo para trabajadoras y trabajadores municipales por el esfuerzo y compromiso durante la cuarentena. Ofrecimos a los sindicatos SOEM y UPCN (y aceptaron) el pago de un estímulo de 12.000 pesos para todos las y los trabajadores municipales y un extra de 5.000 pesos (es decir, cobrarán 17.000) para los esenciales», publicó en su cuenta de facebook el intendente de Laprida, Pablo Torres.

«Se cobrará a fines de noviembre y se financiará con una tasa de 35 pesos (un alfajor Jorgito simple) por hectárea y por única vez a las producciones de más de 400 hectáreas y un monto a grandes empresas (bancos, electricidad, gas, televisión por cable, telefonía) de capitales no lapridenses (no afecta a comercio ni industria local)», detalló el mandatario en la red social y remató: «Una forma de premiar a las y los trabajadores que nos cuidaron –y nos siguen cuidando– durante la pandemia». La iniciativa deberá ser aprobada por el Concejo Delibetante local, aunque de pasar el filtro legislativo, un productor con 400 hectáreas debería poner 14 mil pesos.

La iniciativa causó «indignación» en el sector agrario y fue la Sociedad Rural quien llevó la voz cantante del rechazo. «No es constitucional», argumentó Luis Grippa, el presidente de la Sociedad Rural de Laprida, quien agregó que el gravamen «no cayó bien» entre los productores.

“Él (en referencia al intendente Torres) se mandó como un hecho consumado. No es necesario que los aportes salgan siempre del campo, pero no negamos que el gesto es importante y valoramos el esfuerzo de salud”, expresó Grippa a Cadena 3.

«No negamos que nos hayan cuidado (los trabajadores esenciales), pero si el municipio venía con las cuentas ordenadas, ¿por qué no ponen la plata ellos?”, chicaneó el dirigente de la Sociedad Rural y acto siguiente se sumó, al igual que muchos otros sectores de la oposición, a reforzar un discurso antipolítica: “Señores de la política y Ejecutivo, hagan un gesto ustedes también y rebajen sus sueldos».

Ante el desafío de Grippa, el intendente del Frente de Todos recogió el guante y respondió: «Nunca lo dije porque me parece que no hay que hacer bandera con esto, pero ante la aparición de «indignados» que (por negarse a poner 35 pesos para premiar a nuestras trabajadoras y trabajadores esenciales) reclaman que los políticos locales se bajen el sueldo, voy a tener que decirlo. El 10 de diciembre cuando asumí, puse por decreto un tope a mi sueldo de intendente. Eso implicó una rebaja del 30 % de mi salario. Hoy mi salario es el 40% menos del que podría cobrar. Devuelvo al Municipio 100.000 pesos por mes, es decir a lo largo del año entregaré al Municipio 1.200.000″.

«No voy a comprometer el sueldo de las y los funcionarios porque ganan poco en comparación al trabajo y la dedicación que le ponen. Trabajan 12, 14 o 16 horas diarias. No tienen sábado ni domingo, y les doy de vacaciones 5 días por año. Un director gana 60 mil pesos, un secretario 90 mil», amplió Torres.
«El problema es ideológico, el dinero de la tasa para el bono es mínimo (y más mínimo aun si se lo compara con el aporte anual que hace el intendente). O sea, la cháchara anti-política suena bien, pero cuando vamos a la realidad se ve que es sólo cháchara», concluyó el intendente.

Laprida es un partido del centro sur de la provincia de Buenos Aires, que tiene una población de apenas 11 mil habitantes, cuya principal actividad es la ganadería. El enclave en plena «pampa húmeda» tiene casi la mitad de las cabezas de ganados de la provincia, en una superficie de 10,125 millones de hectáreas.

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