El intendente del partido bonaerense de Chacabuco, Víctor Aiola (Juntos por el Cambio), criticó a los vecinos de esa ciudad que participaron el fin de semana del banderazo contra la expropiación de Vicentin en medio de la cuarentena por coronavirus, al considerar que «pusieron en riesgo en la salud pública».
En declaraciones formuladas a radio Provincia, el jefe comunal precisó que el sábado, cuando se llevó a cabo en distintas ciudades la protesta contra la intervención a la empresa, su gobierno pidió la intervención del Juzgado Federal de Junín.
«Lo que está prohibido, está prohibido, y no podemos por una marcha poner en riesgo la salud pública», expuso Aiola y planteó que, «más allá de la causa, (en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio) no se puede concurrir a plazas ni manifestarse».
«Hay que ser bien claro: las normativas o son para todos para ninguno», enfatizó el jefe comunal de Juntos por el Cambio y agregó que él gobierna «para todos los vecinos de Chacabuco».
En ese marco, sostuvo que, como médico pediatra, trabaja «para cuidar y proteger la salud de todos los vecinos» y analizó que «cualquier acto que vaya contra de eso me causa rechazo y por eso informamos al juzgado federal» sobre la manifestación que se estaba llevando a cabo en el distrito.
«No es el momento para hacerlo. ¿No pudimos en este tiempo visitar a nuestros padres, que son grandes, y vamos a marchar por la ciudad en masa? Es contradictorio», evaluó.
En ese sentido, el intendente expuso que «no se puede marchar porque eso no es cuidarnos», y apuntó que «hay otras formas de manifestarse en democracia, pero no tiene nada que ver exponernos de esa manera».