Internet es una red de computadoras que se creó para poder sobrevivir a una guerra nuclear. Está planeada de tal manera que si una parte desaparece físicamente (¡glup!), otra se encargará de su tarea y la comunicación seguirá en pie.
La cuarentena a la que el coronavirus somete al mundo entero aumentó el consumo hogareño de internet: Netflix, WhatsApps para estar comunicado con los que queremos, Facebook, Twitter, Instagram y portales de noticias (elciudadanoweb.com es el mejor, por eso está leyendo esto) están siendo consumidos desde conexiones hogareñas como nunca antes.
Por esa razón, circulan por la misma red avisos, de todos los sectores, de que internet está a punto de colapsar y de que seamos cuidadosos. Lo cierto es que según los grandes proveedores de internet, el consumo global de ancho de banda sólo subió un 20% más desde el comienzo de la cuarentena, en Argentina y a nivel mundial.
No es el caos ni el fin de internet como lo vaticinan los mensajes que llegan a traves de… ¡adivinen! ¡Sí! Internet, la misma red que dicen está colapsada o a punto de.
Pero también es cierto que ciertos proveedores han tenido problemas con sus clientes. Los proveedores grandes de conexiones a internet diseñan sus redes teniendo en cuenta escenarios como este, donde el consumo sube rápidamente y en el que pueden necesitar manejar más trafico de lo normal. Para ello agregan capacidad de sobra. Esto en el lenguaje de los nerds se lo conoce como headroom, que en realidad es una palabra que se usa en audio pero que adoptaron en el negocios de las redes de datos.
En audio, el headroom es la diferencia entre un volumen normal y uno que sature. En el negocio de las redes es el espacio que se deja entre el tráfico normal y uno que sature las redes. Ese espacio todavía no ha sido ocupado por el tráfico generado por la cuarentena, y está lejos de ser ocupado.
Netflix hizo mucho para que los proveedores aumentaran su headroom. La adopción masiva de este y otros servicios de streaming de video hizo que en los últimos años las empresas de conectividad a la red aumentaran su capacidad de atender grandes demandas (su… ¿cómo era? Sí, headroom. Ha visto que se aprende mucho leyendo un diario).
Pero por otro lado quienes mayor impacto pueden tener son los proveedores de internet más pequeños. Aquellos que dan servicio a localidades de pocos habitantes o de pocos clientes ya que por razones económicas, su headroom es menor y poseen sólo una o dos opciones de conexión a la red.
Internet está siendo la herramienta fundamental para comunicarnos y mantener viva la sociabilización que perdimos en estos días. No tenemos que tener miedo de «tumbarla» o «quemarla» por preguntar por WhatsApp a nuestros amigos cómo están, pero sí usarla con conciencia y responsabilidad: ¿Por qué dejar a Netflix encendido sin prestarle atención como si fuera una transmisión de TV normal?
Internet va a sobrevivir, y nosotros con ella (¿o ella con nosotros?). Bueno, esa era la idea, y usted me entendió.
Quédese en casa. Vea películas. Y lea todo lo que pueda.