Martín Senn tenía 27 años. En la madrugada de este lunes, de acuerdo con la reconstrucción fiscal, compartía en la zona sur una sobremesa con otras dos personas, ambos policías de la Guardia Rural Los Pumas, en la que el trío consumió alcohol y drogas. El muchacho, dijeron sus acompañantes, se descontroló y se puso violento, por lo que lo echaron de la casa en donde estaban y, tras ello, mantuvieron una pelea a golpes en una estación de servicio cercana. El muchacho fue demorado por agentes de la Policía Acción Táctica (PAT), quienes una hora más tarde lo trasladaron al Hospital Roque Sáenz Peña, desde donde lo derivaron al de emergencias Heca por una descompensación cardíaca que, en principio, los médicos no atribuyen a las lesiones sufridas en el altercado. El miércoles, desde el centro de salud de alta complejidad, comunicaron que había fallecido.
La reunión que derivó en la muerte del joven fue en un domicilio de Gálvez al 1200 donde vive uno de los detenidos por el hecho, identificado como F.G. e integrante de la Guardia Rural Los Pumas. Con él estaba otro compañero de esa fuerza de seguridad, A.C.C., y la víctima. Los dos primeros quedaron detenidos, y en la audiencia imputativa de este miércoles relataron que, pasados 20 minutos de la medianoche del domingo, tras haber consumido alcohol y estupefacientes, Senn se tornó agresivo, por lo que decidieron echarlo de la vivienda.
Ya afuera, el trío se trenzó a golpes de puño a unos metros de la casa, cerca de la estación de servicio de Entre Ríos y Gálvez. Hubo un llamado al 911 e intervino personal de la Policía de Acción Táctica. «Allí proceden a la aprehensión de la víctima, quien se encontraba en estado de excitación psicomotriz. Aproximadamente a la 1.10 en momentos en que Senn se encontraba bajo custodia, sufre un paro cardiorrespiratorio por lo que es derivado de emergencia al Roque Saenz Peña y luego al Heca, donde fallece el día 16 de febrero en horas de la noche», explicaron voceros de la oficina de prensa del Ministerio Público de la Acusación (MPA), aunque no aclararon dónde quedó demorada la víctima.
El joven ingresó con un cuadro grave de salud, pero el informe médico no lo atribuye a los golpes que recibió en la pelea con sus contertulios, aclararon.
El fiscal de la Unidad de Flagrancia César Cabrera, que intervino en el momento había solicitado el mismo lunes un informe médico forense para determinar la calificación legal a imputar a los dos guardias rurales detenidos.
El dictamen preliminar refirió que la víctima no presentaba lesiones traumáticas en cráneo, abdomen y pelvis ni fracturas óseas. Sí, múltiples escoriaciones en rostro, rodillas tobillos y pies, lesiones que carecen de la gravedad suficiente para causar la gravedad del cuadro con el que Senn ingresó al Heca.
Lo que resta conocer es si hubo responsabilidad de los policías que tuvieron en custodia a la víctima, el examen toxicológico ordenado por el fiscal para determinar la causa de fallecimiento por paro cardiorrespiratorio, y especificaciones de la autopsia a cargo del Instituto Médico Legal (IML).
Este miércoles, en la audiencia imputativa por videoconferencia a los guardias rurales A.C.C y F.G., el juez de primera instancia Nicolás Foppiani tuvo por admitida la calificación legal de lesiones leves (en ese momento la víctima estaba internada) y en acuerdo de partes entre la Fiscalía y la defensa dispuso como alternativa a la prisión preventiva la libertad de ambos imputados bajo medidas restrictivas.
La imputación es provisoria, y puede modificarse una vez conocidos los resultados de la autopsia y el análisis toxicológico de la víctima, detallaron y no brindaron especificaciones sobre otras responsabilidades en la muerte del joven, quien se descompensó estando en custodia del Estado.
