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Invitan a pensar el lugar de las mujeres en las luchas latinomericanas

La cátedra de Estudios Sociales del Sur, de la Facultad de Humanidades y Artes de la UNR presenta la charla ¿Qué corporalidades prefiere el patriarcado en nuestra América?, a cargo de Constanza Estepa y de Enrique Stola. La cita es este martes, a las 18, en el salón de actos

La cátedra de Estudios Sociales del Sur, de la Facultad de Humanidades y Artes de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), invita a la charla ¿Qué corporalidades prefiere el patriarcado en nuestra América?, a cargo de Constanza Estepa y de Enrique Stola. La cita es este martes, a las 18, en el salón de actos de la casa de estudios.

«Hace un tiempo que América Latina se encuentra sacudida y atravesada por políticas neoliberales, sin embargo varios países de la región han sido testigos de la resistencia y la lucha popular. Es frente a esta situación que se observa la cara más cruenta del Estado moderno: asesinatos, violaciones, desapariciones, etc. siendo las mujeres y otras identidades no binarias algunos de los sectores más afectados por el clima de violencia estatal», dice la gacetilla de prensa.

«En Argentina, si bien estamos siendo testigos de un momento histórico de avance de la lucha feminista (y de la reacción que esto provoca en los sectores más conservadores), en la agenda pública y hasta en la legislación no se refleja con la práctica del poder judicial. Si hablamos de punición y a qué cuerpos se dirigen preferentemente las prácticas de disciplinamiento dictadas por la justicia argentina, lamentablemente abundan los ejemplos que van desde la incapacidad de dar respuesta a la situación de violencia denunciada (Higui); ‘condenas ejemplares’ impuestas a mujeres que en raras ocasiones aplican cuando el agresor es varón (Nahir Galarza); hasta fallos en donde se busca desestimar la figura de femicidio, evitando así la aplicación de una condena (Lucía Perez). Es por esto que la perspectiva de género se vuelve un arma tan valiosa frente a estos casos, la cual nos interpela a todes como sociedad y nos llama a visualizar las estructuras jerarquizadas de las relaciones de género como un primer paso para comenzar a desarmarlas y construir un mundo mejor», continúa.

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