Irán seguirá impulsando su programa nuclear pese a las advertencias de nuevas sanciones lanzadas por Estados Unidos y Francia luego de que un informe de Naciones Unidas (ONU) alimentara las sospechas de que Teherán estaría desarrollando armas atómicas. El presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, reiteró ayer que el programa nuclear de su país tiene fines civiles y que “nada ni nadie” podrá detener “el progreso”.
El líder conservador islamista rechazó las conclusiones dela Agencia Internacionalde Energía Atómica (Aiea) de las Naciones Unidas, que anteayer informó que aparentemente Irán trabajó en el diseño de una bomba atómica y podría aún estar realizando investigaciones sobre este tipo de armamento. “El pueblo iraní es inteligente, no va a construir dos bombas frente a las 20.000 que ustedes poseen”, dijo Ahmadinejad dirigiéndose a los occidentales. El jefe adjunto del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas iraníes, el general Masud Jazanteayeri, amenazó incluso con destruir Israel si este país ataca las instalaciones nucleares dela República Islámica.
El texto dela Aiea, que fue precedido por advertencias israelíes que incluían ataques militares, indicó que la información “creíble” recavada de estados miembro y otras fuentes “sugiere” que Teherán se estaría esforzando por desarrollar armas atómicas.
Tanto Francia como Estados Unidos hablaron de profundizar las sanciones contra Irán.
Francia pidió concretamente una reunión del Consejo de Seguridad dela ONUpara aprobar “sanciones sin parangón”, dijo el canciller francés, Alain Juppé. Sin embargo, el ministro de Defensa, Gérard Longuet, recalcó que la posición francesa no equivale a pedir una intervención militar. “Podemos hacer mucho en los sectores económico, tecnológico e industrial, sin recurrir a una solución violenta”, subrayó.
En el mismo sentido se pronunciaron altos funcionarios de Washington.
“Creemos que hay un amplio espectro de acciones que podemos tomar”, dijo un funcionario dela Casa Blanca. Versiones no confirmadas oficialmente indicaron que Estados Unidos podría imponer más sanciones a Irán, posiblemente a bancos comerciales o compañías importantes, pero no a las firmas petroleras o gasíferas.
Rusia, en cambio, criticó el informe dela Aieaalegando que reducía las esperanzas de diálogo con Teherán sobre sus esfuerzos nucleares.