La responsabilidad de aislarse y dar aviso a las autoridades sanitarias si se viajó a una zona de circulación del nuevo coronavirus covid-19 o se padecen síntomas compatibles se alinea con los mínimos estándares de solidaridad social ante una pandemia que, en el invierno que se acerca, puede golpear al hemisferio sur y en particular a la Argentina. Es para cuidarse cuidando a los demás. Además, es un delito violar las obligaciones sanitarias.
Sin embargo, muchos argentinos privilegian comodidades propias sobre conveniencias colectivas, y en Santa Fe ya hubo intervenciones por ciudadanos que debieron ser contactados por autoridades policiales ante avisos de vecinos que los señalaron por no cumplir con lo que fija el protocolo nacional sobre la enfermedad: la obligación de informar y someterse a cuarentena –14 días–, medidas cuyo incumplimiento está penado por ley.
Uno de los casos que refieren los partes policiales es el de una persona que regresó a Rosario de un viaje a los Estados Unidos, país al que su presidente Donald Trump declaró en emergencia por el covid-19. No sólo no se aisló en su casa sino que fue al casino de la zona sur de la ciudad, que con las restricciones de factor de ocupación dispuestas por la Municipalidad sigue funcionando. El aviso lo dieron sus vecinos de la zona de calle Italia al 3000.
Otro ejemplo corresponde a la capital provincial, y emana de la Unidad Regional I. Es el de una vecina que volvió de España y no se sometió a la cuarentena obligatoria. Los habitantes de su barrio la vieron salir de la casa y dieron aviso a la Policía, que la contactó.
Un caso en las antípodas, aunque con desconocimiento de las áreas a las que acudir, tuvo por protagonista a una mujer de 77 años, también, en la ciudad de Santa Fe. Cristina G. se llegó hasta la comisaría 3a para informar que estuvo en Europa y en contacto allí con personas infectadas con el nuevo virus. De inmediato, en comunicación con autoridades sanitarias de la provincia, se activó el protocolo de aislamiento, atención y análisis para determinar si se contagió. En su caso, por la edad, pertenece a un grupo de riesgo.
Otro de los avisos para activar el protocolo de aislamiento se dio en la cabecera de acceso santafesino al Túnel Subfluvial por un colectivo de la empresa Flecha Bus con destino a Paraná ante un pasajero bajo sospecha de posible contagio por coronavirus. El parte no da precisiones sobre los fundamentos de la sospecha, pero afirma que en este caso también se activó el protocolo sanitario.
Obligatoria y con penas por no cumplirla
El DNU publicado el jueves último, que lleva la firma del presidente Alberto Fernández, establece que quienes violen el aislamiento obligatorio ante sospecha de infección por coronavirus serán denunciados por la posible comisión de los delitos previstos en los artículos 205 y 239 del Código Penal.
El último de esos ítems establece que “Será reprimido con prisión de 15 días a un año el que resistiere o desobedeciere a un funcionario público en el ejercicio legítimo de sus funciones o a la persona que le prestare asistencia a requerimiento de aquél o en virtud de una obligación legal». La otra figura legal está en el Capítulo IV del Título VII del Código Penal, que tipifica los delitos contra la salud pública. El artículo 205 dice que “será reprimido con prisión de seis meses a dos años el que violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia».
El tipo penal tiene por objeto sancionar aquellas acciones u omisiones dolosas a través de las cuales se pueda introducir o propagar una epidemia. Algunos autores de Derecho Penal aclaran que para que la conducta merezca esta sanción debe ser una violación a una norma del Estado de cumplimiento obligatorio, no una mera sugerencia o consejo preventivo. El DNU presidencial establece esa obligatoriedad de la cuarentena, en este caso por 14 días según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.
Se trata de un delito federal, que debe atender el fuero correspondiente. Sin embargo, fuentes de esa área explicaron a El Ciudadano que un juez provincial que reciba una denuncia de violación de esas disposiciones sanitarias puede derivarlas a un colega federal. Hasta el momento, agregó, no tenía registro de denuncias en Rosario.
La cuarentena preventiva es obligatoria para todos los viajeros –argentinos o turistas extranjeros– que ingresen al país procedentes de alguno de los países con alta circulación de coronavirus. Incluye a los provenientes de toda Europa (no sólo a Italia, Alemania, España y Francia), China, Japón, Corea del Sur, Irán y Estados Unidos. Es una lista provisoria, que puede ampliarse de acuerdo a la situación epidemiológica global.
Responsabilidad social en cuarentena
Italiano con fiebre y tos que vino a Expoagro fue preso tras esfumarse de hotel
El segundo fallecido por el virus en la Argentina, un ingeniero y docente de la Universidad Tecnológica Nacional regional Chaco, había vuelto al país de un viaje por Egipto, Turquía y Alemania el 24 de febrero último. Recién el 5 de marzo fue a una clínica privada de Resistencia ante síntomas compatibles con un contagio, y ya con la salud gravemente comprometida. Tenía antecedentes de neumonías y una operación pulmonar. Nunca dio aviso a las autoridades sanitarias ni se aisló. Antes de internarse, concurrió a la Universidad. Allí estuvo en contacto con sus estudiantes, que ahora fueron puestos en cuarentena. El hombre, de 61 años, falleció pasado el mediodía de este viernes.
Los casos de violación a las normas sanitarias se suceden.
La Secretaría de Seguridad de Santiago del Estero informó sobre la detención de tres personas que presentaban síntomas sospechosos de coronavirus y violaron la cuarentena obligatoria.
Una de ellas, apresada en la vía pública de la capital santiagueña, es un hombre de 66 años que había llegado a la Argentina en un vuelo proveniente de España el 2 de marzo.
El otro hecho involucra a dos chaqueños que viajaban en un automóvil procedentes de su provincia y fueron interceptados en un control policial caminero. Uno de ellos tenía colocado un barbijo y reconoció que sufría fiebre alta y dolores en el cuerpo.
Hubo, además, un menor oriundo de Chaco demorado en la misma ciudad de Santiago. El muchacho circulaba con un barbijo, padecía fiebre alta y dolores en el cuerpo.
Extranjeros, también en falta
Algunos turistas extranjeros mostraron la misma irresponsabilidad que los locales. El primer caso conocido fue el de un italiano que arribó a la Argentina para asistir a la Expoagro, y ante la interpelación de autoridades intentó salir del país sin someterse a los análisis, luego de interactuar con numerosos visitantes a la muestra. Lo detuvieron en el aeropuerto de Ezeiza.
En Santiago del Estero hubo otro caso, detectado durante un control vehicular sobre Ruta Nacional 34, a la altura del kilómetro 398, encabezado este viernes por agentes de la comisaría 34 en conjunto con personal de vialidad. Interceptaron una Ford Ranger 4×4 XLT conducida por el ciudadano francés Brunner Jean Jacques Armand, de 67 años, quien admitió que había llegado a la Argentina desde París hacía tres días. Primero fue a Buenos Aires, pasó por la ciudad santafesina de Rafaela y lo detuvieron cuando se dirigía a la localidad santiagueña de Bandera para visitar a su hijo y a su madre. Afirmó que no fue sometido a ningún examen médico al arribar al país. Lo dejaron seguir el viaje con anotación del domicilio en Bandera y comunicación a las autoridades sanitarias.