Israel y los palestinos reanudarán las conversaciones directas de paz en Washington a partir del 2 de setiembre, con la meta de alcanzar en un año un acuerdo para la creación de un Estado palestino, afirmó la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton.
«Invité al primer ministro israelí Benjamín Netanyahu y al presidente de la Autoridad Palestina Mahmud Abas a reunirse el 2 de setiembre en Washington DC para relanzar las negociaciones directas» y sin «precondiciones», dijo Clinton en una conferencia de prensa.
El presidente Barack Obama será anfitrión del diálogo, en el que también participarán el presidente egipcio Hosni Mubarak y el rey de Jordania Abdulah II, cuyo «liderazgo y compromiso con la paz será esencial para lograr el éxito» de las conversaciones, precisó Clinton.
Netanyahu indicó en un comunicado que recibía «favorablemente la invitación de Estados Unidos a iniciar negociaciones directas (con los palestinos) sin condiciones previas», algo por lo que brega «desde hace 18 meses».
Hasta ahora, Abas se negaba a sentarse en la mesa de negociaciones con Israel sin un cese previo de la colonización israelí, un levantamiento del bloqueo contra la Franja de Gaza, así como garantías sobre las fronteras de un futuro Estado palestino.
El diálogo directo entre israelíes y palestinos se suspendió en diciembre de 2008, tras una operación militar de Israel contra el Hamas en la Franja de Gaza.
Palestinos e israelíes sostuvieron discusiones indirectas, con la activa participación del enviado estadounidense para Medio Oriente, George Mitchell.
Del lado palestino, el Hamas rechazó la invitación «engañosa» de Estados Unidos al diálogo directo, según dijo a la AFP su portavoz Sami Abú Zuhri.
Clinton dijo que la meta es «resolver todos los asuntos que consideramos pueden ser solucionados en el transcurso de un año», en alusión a temas como los límites de un futuro Estado palestino, el estatus de los refugiados palestinos y el futuro de
Jerusalén.
Asimismo, señaló que tanto ella como el presidente Obama, así como Netanyahu y Abas, compartían «el objetivo de dos estados, Israel y Palestina, viviendo uno al lado del otro con paz y seguridad».
La nueva ronda de negociaciones -que recibió el firme apoyo del Cuarteto para Medio Oriente (Unión Europa, Naciones Unidas, Estados Unidos y Rusia)- «debería tener lugar sin precondiciones» y «se caracterizará por la buena fe y un compromiso para que sean exitosas», destacó Clinton.
La jefa de la diplomacia estadounidense instó a todas las partes a dar pasos «para avanzar en el esfuerzo, no dificultarlo». «Han habido dificultades en el pasado. Habrá dificultades en el futuro. Sin ninguna duda, nos enfrentaremos a nuevos obstáculos. Los enemigos de la paz seguirán intentando derrotarnos y descarrilar estas conversaciones», advirtió Clinton.
«Pero le pido a las partes que perseveren, que sigan avanzando aún a través de los momentos difíciles, y que sigan trabajando para alcanzar una paz justa y duradera en la región», agregó.
Obama sostendrá el 1 de setiembre reuniones bilaterales con los cuatro líderes, Netanyahu, Abas, Mubarak y el rey Abdulah, que serán seguidas por una cena grupal, añadió la secretaria de Estado norteamericana.
El representante del Cuarteto para el Medio Oriente, el ex primer ministro británico Tony Blair, fue invitado a la cena, agregó.
Clinton invitó a Netanyahu y Abas al Departamento de Estado para un encuentro trilateral el 2 de setiembre para relanzar las conversaciones directas.
Desde Bruselas, la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, exhortó a que «las partes deben trabajar rápido y duro sobre todos los asuntos» pendientes para «cumplir con el llamamiento del Cuarteto de alcanzar una solución negociada en un año».