El gobierno italiano cerrará hasta el 31 de julio próximo sus puertos a los barcos con bandera extranjera que rescaten a migrantes náufragos en el Mediterráneo mientras dure la «emergencia nacional» declarada por el premier Giuseppe Conte con motivo de la pandemia de coronavirus.
A través de un decreto que publicó este miércoles el diario Il Messaggero, el gobierno dispuso la prohibición de la llegada de barcos con inmigrantes para no comprometer sus «estructuras sanitarias», en momento en los que hay casi 95.000 contagiados de la enfermedad en Italia.
Según la norma, que lleva las firmas de los ministros de Infraestructura y Transporte; Exteriores; Interior y Sanidad, la decisión se mantendrá mientras dure la «emergencia sanitaria nacional», fijada por Conte hasta el 31 de julio.
La decisión del gobierno afirma por otro lado que sus puertos, lugar de arribo de miles de personas al año desde las costas de África, no pueden ser considerados «lugares seguros para los rescates llevados a cabo por barcos con banderas extranjeras más allá del área italiana».
En lo que va del año, 2.971 inmigrantes ilegales desembarcaron en los puertos italianos, según los datos del ministerio del Interior, frente a 550 personas en 2019, cuando regía la política de «puertos cerrados» del ex vicepremier y ministro del Interior Matteo Salvini, líder de la derechista Liga.