El gobierno italiano anunció este lunes que 349 personas positivas con coronavirus fallecieron en las últimas 24 horas, lo que elevó la cantidad de víctimas fatales por la enfermedad a 2.158, en un contexto en el que el gobierno confirmó que «aún no se alcanzó el pico» de contagiados.
«Debemos comunicar 349 nuevas víctimas y 2.470 nuevos contagios», anunció el titular de la Protección CIvil, Angelo Borrelli, en conferencia de prensa.
Según Borrelli, el total de casos positivos en el país es de 23.073, de los que casi la mitad (10.197) está «en aislamiento domiciliario con nulos o pocos síntomas» y otros 1.851 permanecían en terapia intensiva.
La región más golpeada sigue siendo la norteña Lombardía, donde en las últimas 24 horas se registraron 202 muertos y 1.377 contagiados, para un total de 1.420 víctimas fatales y 14.649 positivos.
Dentro de las medidas para evitar que se expandan los casos positivos hacia el sur del país, el gobierno italiano dispuso suspender el movimento de personas desde y hacia la isla de Sicilia.
Con el objetivo de «limitar al máximo el riesgo de posibles fuentes de contagio provenientes de fuera de Sicilia», el gobierno dispuso «la
suspensión de las conexiones y de los transportes ordinarios de personas de y hacia» la isla.
Según un comunicado del Ministerio de Transporte, la decisión responde a un pedido de las autoridades del gobierno regional.
Los traslados sólo serán autorizados «por demostradas e improrrogables exigencias», agregó la cartera de Transporte. Las conexiones aéreas sólo quedarán permitidas hacia Roma y ante emergencias, y se cancelaron todos los vuelos internacionales hacia la isla.
Pese a las medidas ya vigentes hace casi una semana, el primer ministro, Giuseppe Conte, advirtió que su país «aún no alcanzó el pico» de contagiados con coronavirus, pese a las medidas restrictivas para frenar el avance de la pandemia.
«Si continuamos quedándonos en casa, evitando contactos riesgosos, seremos más eficaces para contener el virus; los especialistas dicen que todavía no alcanzamos el pico de contagos», planteó Conte en una entrevista publicada este lunes por el diario Corriere.
«Estas son las semanas más riesgosas y necesitamos la máxima precaución», planteó Conte, que días atrás decretó varias limitaciones al desplazamiento de personas, así como la suspensión de clases en todo el país y el cierre de bares y restaurantes.
«Debemos esperar algunas semanas para verificar los resultados de nuestras decisiones», pidió el premier a la hora de evaluar el impacto de las medidas.
De todos modos, Conte sostuvo que no se puede «bajar la guardia» ya que «es el desafío más importante de los últimos decenios».
Asimismo, Conte confirmó que el gobierno desembolsará 25.000 millones de euros en diferentes medidas, desde el apoyo a la salud pública y acciones destinadas a sostener los niveles de empleo y actividad económica del país.
Este domingo, el gobierno italiano reportó que en las últimas 24 horas habían muerto 368 personas, la cantidad diaria más alta desde que se llevan registros de la pandemia de coronavirus.
Por otra parte, el gobierno de Lombardía advirtió que estaba a punto de quedar sin camas suficientes en sus hospitales para tratar a los afectados por esta enfermedad.
«Los números continúan creciendo: estamos cerca del momento en que no tendremos más camas para reanimación», lamentó ayer el presidente de la región, Attilio Fontana, por televisión.
La Lombardía, también la región más rica del país, mantiene actualmente a casi la mitad de las personas internadas en terapia intensiva en toda Italia.