A una semana de haber sido estrenada mundialmente en el marco de la Competencia Internacional del 33° Festival Internacional de Cine de Mar del Plata donde, además, obtuvo el Premio Especial del Jurado, la película Vendrán lluvias suaves, del cineasta santafesino Iván Fund, será exhibida en El Cairo Cine Público (Santa Fe 1120) a partir de este jueves y durante todo el fin de semana.
Categorizado como un drama apto para todo público, el film coquetea con el género fantástico a partir de una historia simple muy bien contada que se sitúa en una pequeña localidad argentina del interior. Allí, en un barrio de clase trabajadora, en las afueras de un pequeño pueblo, un grupo de niños y niñas deben enfrentar solos el comienzo de un extraño suceso que convierte a los adultos en entes dormidos.
La película está protagonizada por Alma Bozzo Kloster, Simona Sieben, Florencia Canavesio, Emilia Izaguirre y Massimo Canavesio, niños y niñas que se presentaron a un casting sin experiencia previa en la actuación y menos aún en el cine. En la historia, los niños del pueblo aguardan, entre confundidos y decididos, el momento en que todo vuelva a la normalidad y sus padres despierten de un sueño eterno. Serán días que transcurrirán entre juegos y esperas, no libres de algún peligro, y que dejarán al descubierto lo singular y fascinante del mundo en el que habitan.
“¿No tenés miedo de que tus papás no se despierten?”, le pregunta uno de los protagonistas a otro. Y no se trata de un temor existencial ni de una fantasía de niños sino de un hecho fáctico, literal. El grupo de niños encontrará en esa anormalidad inexplicable una posibilidad para la aventura que los conducirá por un pueblo abandonado a la presencia adulta.
Iván Fund (La Risa y Los Labios codirigida con Santiago Loza) es además de director, guionista, productor y montajista. El santafesino contó que en las últimas películas, y sobre todo en ésta, se manifestaron y empezaron a aparecer elementos y códigos de un cine de género con otras inquietudes.
“Aparece aquí una mirada y unos códigos más personales y con una forma que ya venía transitando y con los cuales me acerco a un lenguaje universal y fantástico que coquetea con ciertos códigos del cine con los que comencé a trabajar y con los que me crié mirando cine. El cine fantástico y de ciencia ficción fue lo que me impulsó a hacer mis propias películas”, detalló Fund.
Con ojos de niños, Iván Fund ofrece una historia compleja de narrar sin caer en golpes bajos ni en lugares comunes, y desde allí ofrece al espectador un cuento fantástico con aroma regional y cotidiano. La identificación con los protagonistas es inevitable. La cámara se posa a una altura más baja y algunos encuadres le permiten reafirmar esa búsqueda apoyada, además, en la forma narrativa, en una gramática estructurada como un cuento infantil que se presenta dividido en capítulos.
Ni niños ni animales son las máximas a la hora de emprender una película. Se dice habitualmente que ambos son extremadamente impredecibles e implican un mayor riesgo a la hora de la producción y el rodaje. Fund no sólo optó por combinar las dos opciones sino que, además, definió que sus protagonistas serían actores no formados, sin experiencia, y donde el juego tomara la iniciativa al momento de rodar. “La película se filmó en Crespo (Entre Ríos), donde yo me crié. Ahí hicimos un casting muy breve donde se presentaron más de ciento cincuenta niños. Como vimos que las niñas actuaban mejor que los niños cambiamos el guión que originalmente pensaba en varones”, detalló.
“Cuando Iván me contó que quería que sus protagonistas fueran niños y perros me sorprendió pero le dimos para adelante”, expresó por su parte la productora del film, Laura Mara Tablón. Y confió: “Me enamoré de la historia de estos niños y de la manera en cómo Iván quería contarla. La película se trabajó entre amigos, hasta las mascotas son de conocidos, fue trabajar con gente que hacía de sí misma”.
El guión estuvo a cargo de Tomás Dotta junto al propio director. Sobre ese trabajo, Dotta dijo que se “dialogó mucho” con la necesidad de “ir hacia otro tipo de películas, hacia algo grande en términos de complejidad técnica”.
En esa búsqueda junto a Fund, la productora agregó que empezaron a pensar la película: “El trabajo fue muy divertido e interesante porque somos muy complementarios. Yo siempre digo que Iván tiene algo que a mí me produce mucha admiración y es su obsesión por ver en detalle todo el tiempo. Yo estaba todo el tiempo en la estructura y en los personajes pero él miraba el detalle, lo que sucedía en el fondo de la escena. Eso es lo que, en definitiva, termina armando la película”.
El jueves 15 de noviembre se realizó la primera pasada mundial del film en Mar del Plata. Pasaron cerca de tres años desde que la historia comenzó a tomar forma y arrancó la búsqueda de fondos para realizarla. “Básicamente fue aplicar a un Fondo (de fomento) del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) y no hubo más búsquedas. Es una película muy pequeña y se filmó en cuatro semanas. Después sí vino un proceso muy largo de montaje hasta que se concluyó”.
Para agendar
La película «Vendrán lluvias suaves», del cineasta santafesino Iván Fund, se presentará en El Cairo Cine Público (Santa Fe 1120). Tendrá cuatro funciones: jueves y el domingo a las 20.30, viernes a las 18 y sábado a las 22.30, con entradas a precios populares.