José Luis Ibarra, el técnico de la primera división del club Sargento Cabral acusado de agredir a la subjefa de la Comisaría 7ª de la Unidad Regional XVII tras haber sido expulsado en el partido del domingo pasado contra Colón de San Lorenzo, realizó una presentación en Fiscalía a través del patrocinio legal del doctor Nazareno Bravo, en la que no sólo se puso a disposición del fiscal Juan Carlos Ledesma, sino que además cuestionó la veracidad del acta de procedimiento confeccionado por el personal policial en torno a los incidentes ocurridos en ocasión del encuentro válido por la 13ª fecha de la Liga Regional Sanlorencina de Fútbol.
La presentación de Ibarra se basa en el contenido de un video registrado por los propios hinchas de Sargento Cabral. Allí, un efectivo policial comenta a la parcialidad del equipo beltranense que la subjefa de la Comisaría 7ª se habría golpeado contra un portón de rejas alambrado que divide que el campo de juego de la zona de vestuarios.
“Ante la explicación brindada por dicho agente policial, ¿por qué han mentido y falseado en la confección del acta de procedimiento policial que en definitiva llega a sus manos para formarse una causa penal en mi contra?”, se pregunta el escrito enviado al fiscal Ledesma. “¿Qué personal policial responsable y a cargo del operativo de seguridad asume ahora la responsabilidad de presentarse en Fiscalía para tratar de dar coherencia a la falsa acta de procedimiento confeccionada, ante la luz que arroja el video que se acerca a la presente?”.
En la presentación, Ibarra asegura que “no solamente se han vulnerado mis derechos, sino que también he sido víctima de una violencia institucional propia de épocas de la dictadura militar”. El DT reafirma no haber agredido a la subdirectora policial en cuestión.
Según el descargo, Ibarra procede “a dialogar con el juez de línea de dicho encuentro para solicitar explicaciones del motivo de la expulsión”. Y describe que “inmediatamente soy abordado por una agente de policía, quien tomándome del brazo me solicita que me aleje y me retire del campo de juego. Simplemente le solicité a dicha agente que no me tocara”.
“Allí se acerca Alejandro Gallicchio, dirigente del club, para acompañarme a retirarme del campo de juego. Caminando por el pasillo que conecta el campo de juego con el vestuario del club Colón, y casi llegando a la puerta del vestuario, un agente policial que nos acompañaba me empuja por la espalda en el pulmón de ingreso del referido vestuario”, continúa la presentación.
“Al costado de dicho pasillo se encuentra un portón con rejas alambrado, en donde se encontraba la parcialidad de nuestro club. Dichas personas se enfurecieron por tal abuso y comenzaron a gritar al agente policial que me había empujado, donde trastabillé hasta casi caer sino fuera por haberme agarrado por espalda de Gallicchio”.
Ya en el vestuario, el presidente Ignacio “Coco” Brizuela le comunica a Ibarra que la Policía quería llevarlo demorado a la seccional 7ª de San Lorenzo, por haber agredido a una agente de dicha institución pública.
“Grande fue mi sorpresa, debido a que en ningún momento agredí a personal policial actuante. En videos presentados puede apreciarse claramente que el personal policial no sabe explicar el motivo del por qué pretendía llevarme detenido. Simplemente alegaban que una agente o jefa del operativo se encontraba golpeada y que dichos golpes fueron realizados por el suscripto. Nada más falso. Niego haber cometido tales hechos. Aún más, jamás he agredido a una mujer”, desmiente Ibarra.
“En los videos, un oficial actuante sostuvo que la agente se había golpeado en realidad porque la gente que vio que era maltratado y empujado, movió el portón que delimita el pasillo de ingreso al vestuario desde el campo de juego. Dicho movimiento del portón hizo que le pegara en la cara a la referida agente”, justifica la presentación.
También Ibarra cuestionó los dichos de Diego Maio, director de Coordinación de Seguridad de Competencias Deportivas y Espectáculos Masivos de la provincia de Santa Fe. “Anunció que iba a recibir una sanción sin siquiera haber escuchado mi relato ni ver los videos presentados”, cuestiona el descargo, luego de que el funcionario provincial anticipara que al DT de Sargento Cabral le corresponderá una sanción de al menos 5 años de prohibición para dirigir e ingresar a cualquier cancha del fútbol argentino.
“Dicho agente policial que me empujó, también logró enardecer a la familia del fútbol de Sargento Cabral. Y no contento con ello, confeccionó un acta de procedimiento ideológicamente falsa y con claras intenciones de perjudicar mi buen nombre”, concluye la presentación de Ibarra, a quien se le formó una causa por amenazas y lesiones dolosas en ocasión de espectáculo deportivo.
