El director de formación arbitral de la AFA, Miguel Scime, confirmó esta mañana que el árbitro Mauro Vigliano «descansará» luego de su actuación en el superclásico, y afirmó que el partido «no tendría que haberse jugado».
En cuanto a la situación que derivó en el penal a favor de River y la expulsión del capitán de Boca Fernando Gago, Scime afirmó que «está comprobado científicamente que las gotas de agua se transforman en lupa, entonces con la cortina de lluvia, el árbitro vio lo que no pasó, una cabeza, una mano que se mueve y consideró un tiro desde el tiro penal».
En declaraciones al programa Sportia, por TyC Sports, el máximo responsable de la formación arbitral de la AFA admitió además que el partido «no tendría que haberse jugado» debido a las condiciones del campo de juego por las constantes lluvias que cayeron sobre la Ciudad de Buenos Aires durante todo el domingo.
«Los árbitros tenemos dos premisas para suspender un partido, que es unificar los criterios y los procedimientos, donde no podemos errar. El protocolo que tenemos respecto a una situación así, es que el partido no se tendría que haber jugado, lo que ocurrió después es para el recuerdo porque no tendría que haber pasado», explicó.
