Joaquín Pérez, el joven arquitecto de 34 años que fue asesinado de tres balazos para robarle su Renault Clio este miércoles a la madrugada era un chico «buenísimo, trabajador, con pareja y una nena de dos años», recuerdan consternados los vecinos de Arroyito. Era un joven que se crio en el barrio y que todos los vecinos conocían. En sus redes sociales, permanece la foto del día en que se recibió de arquitecto y los mensajes de amor de su mujer por su esfuerzo. También las fotos de partidos de fútbol en el que jugaba y algunos dibujos que dan cuenta de su amor por Rosario Central.
Los vecinos escucharon los tres plomos que terminaron con la vida del chico y no salen del estupor. «Nos tenemos que cuidar entre nosotros. Acá no hay Policía. Somos un barrio organizado, cuadras con alarmas comunitarias y grupos donde nos estamos avisando. Hace dos días entraron a robar personas armadas a un vecino», dijo una joven del barrio.
«Era una belleza de persona. Tenía una criatura de dos años que querían que no escuchara lo que estaba pasando. A los funcionarios no les importa. ¿Ustedes creen que van a venir a ayudar? Joaquín es un número más», comentó una vecina a Canal 3.