El 23 de febrero de 2018 la historia del aborto en Argentina sumó un capítulo importante. El presidente Mauricio Macri anunció que habilitaba a los legisladores a debatir los proyectos que desde hacía años esperaban un guiño del Ejecutivo. En sintonía con la nueva etapa del diario El Ciudadano & La Región en manos de los trabajadores, decidimos poner buena parte de nuestros esfuerzos en una cobertura que estuviera a la altura del momento histórico. Fue un acto consciente y ganado de las capacitaciones en género que iniciamos a fines de 2016 con el apoyo y guía de los periodistas Cristian Alarcón, Sebastián Hacher y Luciana Peker, entre otros.

Diseñamos dos tipos de artículos periodísticos que iban a marcar la agenda mediática de Rosario y Santa Fe. Un grupo que llamamos “de fondo”, donde destinamos recursos humanos y tecnológicos para contar qué había detrás del pedido por el aborto legal, seguro y gratuito. Sumamos estadísticas antes no reveladas de la salud pública y privada. Propusimos notas con referentes médicos, juristas, colegas periodistas especializados y militantes que trabajan desde hace décadas lo que pasa a vecinos y vecinas cuando se detiene un embarazo. Sumamos temáticas que incluían la práctica, como la Educación Sexual Integral (ESI) en la provincia. Con respeto a las noticias de alcance nacional, buscamos producir información regional para que la discusión no sea diseñada por Buenos Aires.

A otro grupo de artículos los bautizamos “de anuncio y cobertura” y demandó usar las fuentes periodísticas y cuanto otro aporte de la ciudadanía teníamos para dar cuenta de lo que pasaba en la ciudad y la capital provincial antes, durante y después del debate legislativo. En el medio, dimos espacio para quienes estaban y están en contra del proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE).

Con el paso de las semanas “Aborto:” se convirtió en un prefijo de decenas de titulares que circularon por las calles, computadoras y teléfonos celulares de la ciudad y del país, según figura en las estadísticas de nuestra página web. Nos agradó la idea de los dos puntos después de la palabra porque proponía un inicio, una apertura y la idea algo nuevo por contar.

Ninguna de las secciones estuvo ausente de planificar y publicar materiales sobre el aborto. Ciudad, política, espectáculos e incluso deportes mostraron cómo la discusión en la ciudadanía crecía día a día. Queremos creer que en muchos casos acompañados de la información de los artículos de esta cooperativa.

En todos los casos usamos el sitio web y nuestras redes sociales para volcar textos y hacer espacio a los registros fotográficos. En algunas ocasiones nos pareció oportuno redireccionar el stream en vivo de las distintas exposiciones que precedieron lo que pasó en el recinto del Congreso. Usamos la portada del sitio con materiales especiales para la web. Al cierre

La redacción sintió los días de las votaciones en el Congreso como si se tratara de un domingo donde Newell´s y Central pelean por ver quien festeja en el Monumento. O un partido del mundial. Además de enviados especiales, el 8 de agosto tuvo un cierre de edición que aún está vivo en las paredes de la redacción de Ovidio Lagos y Brown. El horario de entrega de las páginas a la planta impresora era a la medianoche, pero quienes legislan extendieron hasta la madrugada sus decisiones. Levantamos el teléfono y pedimos más tiempo para mandar las páginas a imprimir. No sucedió. La tapa del diario papel del 9 de agosto reflejó el riguroso “al cierre de esta edición el Congreso votaba la ley del aborto”. Sin embargo, los tiempos de hoy resisten la idea de un cierre y quienes trabajamos en El Ciudadano entendimos que en la votación se jugaba mucho más que un “si” o un “no”. Esa madrugada diseñamos una tapa web que circuló desde la mañana del 9, ya conocido el rechazo. Entendimos que desde ese momento una gran parte de los abortos en Argentina iban a seguir siendo clandestinos.