El juez de Avellaneda Luis Carzoglio rechazó este martes el pedido de detención de Pablo Moyano, acusado de liderar una asociación ilícita vinculada a negocios del Club Atlético Independiente, y la noticia fue celebrada por Hugo Moyano durante un acto de Camioneros, en el que apuntó al gobierno de Mauricio Macri. Más tarde, en conferencia de prensa, el juez denunció amenazas contra su familia.
El magistrado explicó en su resolución que «no puede involucrarse» al dirigente gremial «en asociación alguna de individuos para cometer delitos y menos en carácter de jefe».
A la vez, Carzoglio señaló que «las presuntas acciones y conductas de Moyano de ningún modo, y por el momento, pueden considerarse abarcadas» en los delitos que «se le pretenden endilgar».
Por otra parte, el juez resaltó que las escuchas telefónicas en las que se basaba la investigación «obedecen a los años 2014, 2015 y 2016, con bastante antelación al inicio de la presente causa».
Además, explicó que la intervención de estos aparatos, así como también de computadoras y otros dispositivos electrónicos, «no se ha cumplimentado con las notificaciones a los defensores particulares correspondientes».
De esta manera, Carzoglio rechazó todas las detenciones y allanamientos solicitados por el fiscal de Lomas de Zamora Sebastián Scalera contra Pablo Moyano y otros involucrados en la causa.
Paralelamente, el magistrado anunció una conferencia de prensa en la que tenía previsto denunciar amenazas contra su familia (ver más abajo).
El festejo de Hugo
A su turno, Hugo Moyano destacó que el juez «no aflojó ante las presiones».
El secretario general de Camioneros se enteró del fallo mientras encabezaba un acto del gremio en reclamo por la reapertura de paritarias, tras una movilización al Ministerio de Trabajo.
Hugo Moyano resaltó: «Por más que los gorilas, los anti-obreros, estos HDP que nos gobiernan, el juez ha tenido la suficiente grandeza para no aflojar ante todas las presiones que recibió».
El también presidente de Independiente sostuvo que Carzoglio fue intimidado por «todos los funcionarios que se encargan, entre comillas, de la seguridad».
«Está confirmado que el juez Carzoglio ha dejado sin efecto todas las detenciones. Ha tenido la suficiente grandeza para no aflojar ante todas las presiones que recibió», manifestó Moyano y con sus palabras desató los festejos de los camioneros.
Según anunció el líder sindical, un grupo de gremialistas se preparaba para ir a recibir a Pablo Moyano al aeropuerto de Ezeiza el próximo jueves, cuando el dirigente regresará de un congreso de sindicatos del Transporte que se realizó en Singapur.
«Es un gobierno gorila, que no tiene sensibilidad para nada. No le interesa el hombre de trabajo y dicen que son los mariscales de atacar la corrupción, pero se olvidan de la corrupción del Correo Argentino. ¿Dónde están los 700 mil millones que son de toda la sociedad y se llevó el padre del Presidente? ¿Dónde carajo están? Vienen ahora a hacerse los honestos. Son los instrumentos del FMI, es un gobierno payasesco», resaltó Moyano.
Y agregó: «No gobiernan ellos, gobierna el FMI. Por eso el pueblo tiene que estar unido. Acá hay uno que va a dar la vida por la gente».
“Amenazas de muerte”
El juez de Avellaneda Luis Carzoglio, que rechazó la prisión preventiva de Pablo Moyano, denunció este martes una presunta operación mediática en su contra y ratificó que su familia recibió «amenazas de muerte».
«Confirmo el trascendido que se difundió a través de las redes en cuanto a que no he hecho efectivo el pedido de detención», comenzó diciendo el magistrado durante una conferencia de prensa.
Durante su breve exposición, Carzoglio dijo haber recibido mensajes intimidatorios, pero aclaró que «fueron con posterioridad a haber hecho la resolución» que benefició al dirigente de Camioneros.
«Mi cónyuge recibió a las 11.10 y 11.20 dos llamados amenazándola de muerte. Es más, las amenazas hacían alusión a sus problemas de salud», contó.
El juez acusó además «al personal de la Fiscalía General de Cámara de Lomas de Zamora» por la difusión en los medios del fallo a favor de Moyano.
También apuntó contra la Procuración de la Provincia de Buenos Aires por los datos sobre su carrera judicial que circularon en algunos diarios y canales de televisión y que, a su entender, «sólo tenían» las autoridades de este organismo.
«De todo eso, un 50% es verdad y el resto es todo mentira, son todos carpetazos. Yo estoy orgulloso de haber ocupado esos cargos y a mí no me van a apretar con ese tipo de maneras», agregó, al referirse a su pasado como director del Cementerio Municipal de Avellaneda.
«Este juez no se ha dejado llevar por las presiones de las partes. Tampoco se dejó presionar por la campaña de prensa, especialmente llevada a cabo por el grupo Clarín y La Nación», aseguró.
«En este país se tienen que terminar los aprietes. No tengo miedo, estoy preparado para asumir los riesgos. Estamos custodiados», afirmó y luego apuntó contra algunos periodistas: «El señor (Luis) Majul, (Eduardo) Feinmann y (Adrián) Ventura dijeron que no sabían quién merecería estar más preso. (Jorge) Lanata dijo además que yo era impresentable».
