El abogado David Boies, contratado por los jugadores de la NBA, dijo que el cierre patronal infringe las leyes antimonopolio al negar a los agremiados la posibilidad de trabajar.
«Esperamos que no sea necesario llegar a un acuerdo en los tribunales,» dijo Boies, quien agregó que todos están interesados en resolver esto rápido.
La recién creada asociación de jugadores no ha perdido el tiempo y ya ha presentado dos demandas contra la NBA en dos Estados distintos por el lockout solicitando el fin del mismo y pidiendo ‘treble damages’ (el triple de daños): una cantidad que podría ascender a los 6.000 millones de dólares.
Boies dijo también que «fue un error» el ultimátum que el comisionado de la NBA David Stern le dio al sindicato, ahora disuelto, para que aceptara la última propuesta de contrato de los dueños.
El profesional consideró que esa medida fortaleció los argumentos de los jugadores, porque demostró que había concluido el proceso de negociación colectiva.
“Creo que los dueños exageraron”, dijo Boies en las oficinas generales de la Asociación de Jugadores. «Ellos hicieron un trabajo tremendo, al adoptar una posición muy dura y llevar a que los jugadores hicieran una concesión tras otra, pero la codicia no sólo es algo terrible sino peligrosa».
