Un chica de 13 años violada por un hombre al que conoció a través de una red social fue sometida a una Interrupción Legal del Embarazo (ILE) en el Hospital Materno Infantil «Dr. Héctor Quintana» de Jujuy.
En ese mismo centro asistencial, el jefe de Obstetricia, Gustavo Briones, renunció a su cargo días atrás como consecuencia de la polémica que se generó después de que le practicaran una cesárea a una nena de 12 años que había sido violada, en vez de un aborto.
En el nuevo caso conocido este domingo, la menor sería habitante de un asentamiento cercano al barrio Malvinas Argentinas y se encontraba con un período de gestación de aproximadamente 18 semanas, según indicó el diario El Tribuno.
El aborto fue solicitado por los padres de la chica en el marco de la legislación vigente que lo contempla para los casos de abusos sexuales contra menores de 16 años de edad y cuando el estado de salud de éstos corre riesgo.
En el hecho tomó intervención la Fiscalía Especializada en Violencia de Género y Abuso Sexual, a cargo del fiscal Alejandro Bossatti.
En tanto, la Policía busca al autor de la violación, tarea que se ve complicada porque habría usado datos falsos para armar su perfil de la red social por la que se contactó con la víctima.
El caso trascendió en momentos en que aún no se acalla la polémica por la cesárea que ordenó el gobierno provincial a una menor de 12 años de edad de San Pedro de Jujuy, que fue violada y embarazada por un sexagenario.
Esa chica llevaba 27 semanas de gestación y el procedimiento fue cuestionado tanto por el sector abortista como por el «provida», que solicitaba que el embarazo avanzara hasta que se garantizara la subsistencia del bebé, para luego ser entregado en adopción.
Los médicos provocaron un «parto prematuro» y la bebé, que sólo pesaba 700 gramos, finalmente murió cinco días después.
El jefe del servicio de Obstetricia renunció a su cargo y cuestionó que no se hubiera tenido en cuenta la opinión de los médicos que aconsejaban esperar al menos dos meses más para que el feto se terminara de desarrollar.
La nena de 12 años declaró esta semana en cámara Gesell y su relato apuntó contra un vecino, de 60 años y único detenido en la causa, quien a su vez acusó a la madre de la menor de haberle dado su consentimiento para que abusara de la nena a cambio de dinero. «Yo no abusé de ella, la madre me la cobró», dijo el detenido, en una acusación desmentida en forma tajante por la involucrada.