El presidente de la comisión de Legislación Penal, el diputado nacional Oscar Albrieu (FpV), anunció la presentación, en conjunto con otros miembros de la cámara baja, de un proyecto para la derogación de las llamadas `leyes Blumberg´, sancionadas en agosto de 2004 para el aumento de las penas en determinados delitos contra las personas.
«Se impone la derogación, porque ese conjunto de normas no responde a ningún tipo de política penal racional y, en su momento, constituyeron un paso atrás en materia de legislación criminal» dijo el parlamentario, en declaraciones a Télam.
Albrieu, titular de la comisión de Legislación Penal en la cámara baja, añadió que «estamos trabajando con la diputada Diana Conti, que en el año 2004 era senadora nacional y fue la única que votó en contra de ese paquete de leyes con el propio Juan Carlos Blumberg en el palco del público».
«En general quienes integramos la comisión de Legislación Penal estamos todos de acuerdo en la derogación de estas leyes, y esta actitud es compartida por todas las bancadas, porque lo he hablado con los diputados Ricardo Gil Lavedra y Margarita Stolbizer», agregó.
Sobre los fundamentos para derogar este paquete de leyes dijo que «lo que se hizo fue aumentar las penas rompiendo la debida coherencia que deben tener en una escala que se corresponda con la antijuridicidad del hecho, en la relación con el daño social que causa y su gravedad».
Admitió que «ahora lo que queremos hacer es un gesto claramente simbólico, porque se ha constituido una comisión para tratar el nuevo Código Penal, con lo cual lo más probable es que este tipo de temas estén incluidos en su agenda; y si no fuera así, queremos avanzar con la derogación de estas leyes».
«Lo importante es que la cámara de Diputados de una señal acerca de la derogación de estas leyes», ratificó.
El diputado nacional kirchnerista, representante por Río Negro, hizo declaraciones al término de una charla sobre la ley que incorpora la figura del femicidio en el Código Penal, realizada por invitación de la Defensoría del Pueblo de la provincia.
Esta semana, el ministro de la Corte Suprema de Justicia Raúl Zaffaroni, que participa en la comisión que reformará el Código Penal, consideró que con la elaboración del proyecto «la Presidente (Cristina de Kirchner) ha tenido una iniciativa que es bastante revolucionaria».
Además, el juez del máximo tribunal del país aseguró que la reforma apunta a lograr un nuevo Código Penal «que no permita arbitrariedades de impunidad ni de represión».
Zaffaroni, que preside la comisión encargada de elaborar la reforma -creada a través del decreto 678/2012- reiteró, en una entrevista con el diario Página/12, que las llamadas leyes Blumberg y otros remiendos le han quitado a la legislación penal toda «coherencia», lo que abre la puerta a que los jueces apliquen las normas y castigos bajo su libre interpretación.
«Es necesario que sea una ley clara, no confusa ni enmarañada, que no permita arbitrariedades de impunidad ni de represión, la jurisprudencia penal debe ser previsible y coherente», remarcó.
Agregó en ese sentido que sólo «cuando la ley es clara» y guarda criterios de proporcionalidad en las penas es que «las personas se sienten más seguras».
«Creo que nos hace bien a todos saber con cierta certeza qué es lo que está penado y lo que no está y prever lo que decidirán los jueces. Si no tuviésemos un código, cualquier poder de turno podría hacer con cualquier ciudadano lo que le diese la gana y también dejar impunes a todos los criminales que considere `amigos`», sostuvo Zaffaroni.
Además, el juez de la Corte Suprema explicó que «el Código Penal define los delitos» y advirtió que «si no lo tuviésemos podría ser delito cualquier cosa».
«En relación con la violencia criminal -añadió-, aunque es fundamentalmente una cuestión de prevención, indirectamente puede influir».
Zaffaroni también recordó que «nuestra codificación penal siguió el modelo liberal de Feuerbach y encabezó la parte especial con los delitos contra la persona y no con los delitos contra el estado. Ahora corresponde que los encabece con los delitos contra la humanidad, que casi siempre son delitos masivos contra las personas».