El entrenador del seleccionado argentino, el rosarino Lionel Scaloni, advirtió este lunes que el partido ante Bolivia es de «máxima dificultad», ya que en la altura de La Paz el equipo local «es una de mejores selecciones del mundo».
En la conferencia de prensa previa al partido de este martes a las 17 en el estadio Hernando Siles de la capital boliviana, por la segunda fecha de las Eliminatorias Sudamericanas, el entrenador argentino remarcó que Bolivia «es una potencia» cuando juega en los más de 3.600 metros de altura sobre el nivel del mar.
«Con los jugadores hicimos mucho hincapié en lo que nos vamos a encontrar porque la dificultad del partido es máxima. Jugamos contra una selección que acá (por la altura) es de las mejores del mundo, que pierde muy poco y es importante que el jugador sepa que el rival es una selección potente», expresó Scaloni.
El entrenador confirmó la baja de Marcos Acuña por lesión pero dijo que el equipo lo tendrá luego de la práctica de este lunes en el predio del club The Strongest.
«Fueron unos días difíciles después de Ecuador porque tenemos jugadores tocados. Vamos a esperar a la tarde para confirmar el equipo. Tenemos una idea y no habrá muchos cambios pero sí algunos», adelantó.
Uno de esos cambios será por Marcos Acuña, quien se entrenó diferenciado por una molestia muscular y no llegará en condiciones físicas al partido.
En su lugar, se presumía el ingreso de Eduardo Salvio pero el entrenador rosarino no descartó la opción de «un interno» o de «un extremo».
«Ahogar, se van a ahogar todos los jugadores. El tema es la sensación que uno tiene. Hasta que no lleguemos a la cancha no vamos a saber como reaccionan a esta situación. Hoy podés estar bien y mañana no. Venir dos días antes era para llegar bien al partido. Necesitamos jugadores al ciento por ciento. Si hay alguno que no lo está, hablaremos y tomaré la mejor decisión para el equipo», explicó.
«La práctica de hoy es una buena prueba pero la más importante es una hora y media antes del partido», agregó el entrenador argentino, quien como jugador estuvo en el último triunfo argentino en La Paz en 2005.
«Uno se acuerda y puede tomar muchos ejemplos. Fue una buena experiencia porque ganamos pero fue un partido muy difícil, como son todos acá en la altura. También hablamos con gente que tiene conocimiento y todos coinciden en la dificultad y en que no hay una fórmula», detalló.