Los inspectores de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) detectaron la existencia de alrededor de 200 trabajadores que desarrollan sus tareas en condiciones de esclavitud en empresas radicadas en la localidad bonaerense de Marcos Paz, dedicadas a la fabricación de ladrillos.
La AFIP, a través de un comunicado de prensa, precisó que los predios inspeccionados se encontraban ubicados «entre grandes arboledas y alejados de la ruta, en una zona prácticamente inaccesible».
Los agentes fiscales, que debieron utilizar helicópteros, cuatriciclos y motos para acceder durante la víspera a los establecimientos, constataron «indignas condiciones laborales y una gran precariedad en las viviendas» que utilizaban los trabajadores.
Las condiciones de los extranjeros eran aún peores ya que vivían todos en el mismo galpón, dormían hacinados y no tenían baño.
Además, los obreros demostraron temor ante el patrón e intentaban cubrirlo ante los agentes de la AFIP, ya que se negaban a la apertura de una supuesta vivienda que le pertenecía, pero que en verdad funcionaba como «oficina contable», puesto que allí se hallaron cuadernitos con las sumas abonadas y gastos.
La Justicia acompañó los operativos junto a personal del Ministerio de Trabajo, la Dirección de Migraciones y Gendarmería.
Las órdenes de allanamiento fueron libradas por el Juzgado Federal N° 1 de Morón, a cargo del Juez Jorge Ernesto Rodríguez, con la intervención de la Secretaría Nº 3, en el marco de la causa Nº 7455, iniciada por una denuncia de la AFIP Dirección Regional La
Plata.
Tanto el Juez interviniente, como Secretarios y personal del Juzgado participaron en forma directa en los allanamientos, al igual que el Subsecretario de Delitos Complejos del Ministerio de Seguridad Nacional, Miguel Robles.
También ayer, la AFIP realizó operativos en las provincias de Chubut y Misiones, detectando en esta última a 25 trabajadores rurales que desarrollaban su actividad de forma ilegal y en condiciones de extrema precariedad.
En la provincia litoraleña se realizaron dos procedimientos: el primero fue en Colonia Primavera y el segundo en el Paraje Gentile. En ambos predios, los trabajadores se dedicaban al cultivo de yerba mate y se encontraban en condiciones denigrantes para la condición humana.
Estos trabajadores vivían en carpas improvisadas de material plástico negro y no poseían baños ni duchas, ni tampoco contaban con los servicios básicos indispensables como agua y energía eléctrica.
En tanto, en Chubut, se hicieron dos operativos en obras de construcción ubicadas en la localidad de Rada Tilly. En uno de los procedimientos se pudo constatar que los trabajadores eran obligados a dormir en un tráiler abandonado. En el otro, sus empleados vivían dentro de la misma obra sin las mínimas condiciones de seguridad, salud e higiene.
Entre los dos operativos se relevaron a 16 obreros no declarados de la construcción.