La Casa Blanca condenó como «peligrosa y temeraria» la filtración de cables diplomáticos estadounidenses divulgada por la página de internet Wikileaks. Lo hizo en un comunicado difundido con antelación a que varios periódicos de todo el mundo publicaran la filtración facilitada por la página.
La Casa Blanca aseguró que la divulgación de los cables pone en peligro los intereses de EEUU en política exterior, a agentes secretos y «la causa de los derechos humanos, así como las vidas y el trabajo de los individuos» que los defienden.
Por su parte, el Pentágono condenó la divulgación de documentos «ilegalmente obtenidos» y afirmó haber tomado medidas para evitar que ello vuelva a suceder en el futuro.
En un comunicado difundido unos minutos antes de que Le Monde y The New York Times pusieran en línea artículos que revelan el contenido de los documentos diplomáticos estadounidenses divulgados por el sitio WikiLeaks, el Pentágono condenó «la revelación imprudente de informaciones clasificadas obtenidas ilegalmente».