Contundente, sin atenuantes, justificado, abrumador. Son apenas algunos de los adjetivos con los que puede graficar el triunfo de Oberá sobre Rosario Basket por 100 a 77 en una nueva noche de la Liga Argentina en Sportivo América. El elenco del entrenador rosarino Leandro Hiriart paseó su potencial (es uno de los protagonistas de la Conferencia Norte y jugará el Súper 4) por la Cuna de la Bandera y tuvo como figura a otro rosarino, Rodrigo Sánchez (21 tantos, 6 rebotes), para imponerse a un equipo local que nunca estuvo en partido y terminó sufriendo durante más de veinte minutos de adversidad total.
Si bien se podrá achacar errores defensivos en el dueño de casa, que los hubo, también habrá que darle el mérito de la victoria a un Oberá certero que ganó la batalla en los tres terrenos: la estrategia, la táctica y las matemáticas.
Porque atención a que aunque el dato excluyente del 14 de 28 en triples del Celeste es relevante, el principal factor del triunfo estuvo en la estrategia, porque se jugó al ritmo de la visita, con transición rápida hacia ofensiva y hacia defensa. Y allí estuvo la clave de la comodidad de unos y la precariedad de otros.
Y la táctica regaló otra perla, con Oberá defendiendo zona tras anotación e individual tras ataque fallado. Rosario demoraba mucho cada ataque pelota en mano en pos de resolver la lectura y aunque en el inicio lastimó con Thomas, después el ataque se trabó. Y nunca volvió a arrancar hasta que fue demasiado tarde.
Essengue hizo daño a cinco metros y Rodrigo Sánchez lastimó con su capacidad atlética en el uno contra uno para tomar buena ventaja en el cuarto de inicio, pero cuando las bombas cayeron sobre el Carrillo el partido se terminó de quebrar. Fue un rato de brillantez absoluta (6-6) para sacar de esquema al local, que probó con cambios de nombres y de fisonomía de quinteto, pero que siempre estuvo a contramano del juego.
Con el duelo definido, Luna sentó a los bases y jugó con Giarraffa para subir la bola más mucho uno contra uno de Cooper, que terminó con 33 puntos (23 con el duelo definido) en pos de decorar el 77-100 que retrasa su anhelo de llegar a playoffs. La derrota estaba en los planes ante un equipo importante, aunque quizás las formas hayan generado una preocupación. La gira que viene será vital y prácticamente definitoria para seguir en carrera: Echagüe en Paraná, San Isidro en San Francisco y Tiro en Morteros. Hay chance para enmendar la mala noche. Pero no sobrarán oportunidades.
SÍNTESIS
ROSARIO BASKET 77: Matías Stival 0, Thomas Cooper 33, Hans Feder Ponce 9, Andrés Meinero 8, John Thomas 10 (fi), Federico Giarraffa 7, Franco Pallotti 4, Francisco Zuccali 0, Leandro Chorvat 4, Alen Mansilla 0, Santiago Del Sastre 2. DT: Hugo Luna
OBERÁ 100: Maximiliano Martín 15, Juan Rodríguez Suppi 14, Emiliano Correa 11, Rodrigo Sánchez 21, Gastón Essengue 8 (fi), Santiago Roitman 6, Jerónimo Ramírez Acevedo 4, Gonzalo Pryszczuk 2, Lucas Díaz 9, Taiel Gómez Quintero 10. DT: Leandro Hiriart.
ESTADIO: Sportivo América
ÁRBITROS: Oscar Brítez, Elías Raboy y Valentín Soldano
PARCIALES: 13/26, 33/52, 48/78
Resultados
San Isidro le ganó en Paraná a Echagüe por 70 a 54 con 7 puntos, 7 asistencias y 6 rebotes del todoterreno rosarino Pablo Fernández, mientras que en el dueño de casa hizo 9 tantos Agustín Carnovale.
El Central de Ceres de Quique Lancellotti doblegó a Rivadavia de Mendoza 97 a 94 y Salta a Independiente de Santiago de Estero 76 a 64 con 11 de Matías Bernardini.