Para Lucas Bernardi, Newell’s necesitaba un golpe anímico para tratar de enderezar el rumbo y recuperar una mentalidad positiva. Aunque eso implicara cambiar la estrategia, pero nunca traicionar las convicciones. El clásico fue apenas un pequeño paso en este “nuevo comienzo” que propone el entrenador desde lo emocional. Y ahora busca un resultado positivo y “determinante para seguir creciendo”.
Ayer en Bella Vista, el DT leproso dio una conferencia de prensa en la que consideró necesario jugar “en contra a lo que está acostumbrado”, por el partido y el contexto.
—¿Cuál es la valoración que hacés del clásico con el correr de los días?
—Es la misma que dije después del partido: una valoración anímica. Por el hecho de modificar la estrategia y que el rival no lo esperara, por la manera que el equipo lo llevó adelante. Nos demostramos que podemos pelear un partido, pero nos costó jugarlo, eso está claro. Hicimos un partido interesante en un aspecto, pero nos faltó en la otra parte de la estrategia.
—Claramente el equipo cambió sus formas para el clásico, pese a que desde tu llegada siempre hablaste de mantener un estilo. ¿Cómo se entiende esa decisión entonces?
—Hay momentos en los que debemos modificar las formas, como se dio el último fin de semana, porque el partido y el contexto demandaban eso, buscar un golpe anímico. El equipo jugó en contra a lo que está acostumbrado a hacer y lo llevó a cabo de una manera correcta. Pero la idea es acercarse lo más posible a lo que fue el partido con Racing. Y para eso, debemos seguir creciendo.
—¿Entonces no fuiste en contra de tus convicciones, como algunos dijeron después del partido?
—La convicción de este equipo es mirar hacia delante, asimilar muchas situaciones incómodas que hemos soportado, que supimos asimilar y que lo seguiremos haciendo. La convicción está en ir al frente, seguir en pie, luchando y dándole valor a un montón de cosas.
—Desde Central se habló mucho del planteo que hizo Newell’s. ¿Te molestó que se haya criticado la estrategia?
—Cuando terminó el primer clásico de este año en el Coloso, nosotros hemos sido muy respetuosos y las cosas se terminan ahí. Les tocó a ganar a ellos y a otra cosa. A nosotros nos importa lo que hacemos nosotros y valoramos lo nuestro, nunca desacreditamos lo que hace el rival, aceptamos la derrota y la manera.
—Hablaste de este partido como un puntapié para un nuevo comienzo. ¿Qué implica eso?
—Este ciclo arrancó hace tres meses, pero necesitábamos un cambio anímico. Estábamos en una rueda que giraba siempre en negativo, todo el tiempo. Eso desgasta, genera desconfianza e incomodidad. Ahora aspiramos a tener una mentalidad positiva, algo que se vio a partir del Banderazo. Fueron días de mucha concentración, muy intensos e interesantes para nosotros en lo interno. La expectativa es positiva.
—¿Y cuáles son los objetivos de ahora en más?
—Seguir avanzando con situaciones que seguramente la falta de resultados no nos ha dejado ver. Y conseguir buenos resultados, eso se determinante. Desde el día que uno asume como entrenador sabe que puede dejar de serlo en cualquier momento. La semana pasada me preguntaron que podía pasar conmigo si no ganábamos el clásico. Y esas respuestas las tienen que dar dos personas: Jorge Riccobelli como presidente de la institución y Roberto Sensini como director general de fútbol. Ellos decidirán si este ciclo es bueno o malo y resolverán de acuerdo a desde qué lugar lo evalúen.
Probó con el mismo equipo, pero con otra disposición
“Los intérpretes pueden ser los mismos o se pueden modificar. Todavía no lo he confirmado. Pero será otra manera de jugar el partido. Algunos encuentros demandan ciertas cosas y plantearemos los partidos de acuerdo al rival. Cada partido tiene su forma”. Así, Lucas Bernardi se refirió al cotejo de mañana ante San Martín de San Juan.
En la práctica de fútbol que dispuso ayer ubicó a los mismos once que arrancaron el clásico pero con un sistema 4-3-3, aunque Hernán Villalba terminó con una molestia y su presencia quedó en duda para el choque ante los sanjuaninos.
En el ensayo futbolístico, Bernardi paró a Ezequiel Unsain; Franco Escobar, Marcos Cáceres, Víctor López, Gabriel Báez; Hernán Bernardello, Hernán Villalba, Maxi Rodríguez; Denis Rodríguez, Lucas Boyé y Lucas Mugni. Pero Villalba salió de la práctica con una molestia y hoy será evaluado para determinar si llega en condiciones al choque con San Martín.
En caso de que no se recupere, Bernardello pasará a ser el volante de contención, Denis Rodríguez se ubicaría como interno derecho y se abriría un cupo para ocupar el extremo por esa banda, con Martín Tonso y Mauricio Tevez como candidatos a ingresar a la formación titular para mañana.
El plantel leproso entrenará hoy por la mañana en Bella Vista y luego concentrará en el complejo La Ilusión de Ricardone.
Un malentendido
Lucas Bernardi juró que el gesto que hizo sobre el final del partido, y por el que fue criticado, no fue hacia los hinchas de Central sino un malentendido.
“Pido disculpas por el gesto, la interpretación ha sido distinta. No era lo que se piensa, estaba hablando con mis jugadores de un tema nuestro. Pido disculpas a la gente que pudo haberse sentido ofendida. En ningún momento quise generar nada, ninguna situación incómoda con nadie”, se excusó.
Y agregó: “No fue un gesto de violencia ni nada hacia la gente, yo estaba mirando al banco de suplentes. Pido disculpas, sobre todo a los dirigentes de Central que nos atendieron muy bien. Vino (Luciano) Cefaratti al vestuario porque habíamos tenido un inconveniente antes de empezar el partido. Se preocupó por nosotros y estuvimos charlando un rato”.
“Nos ha traicionado”
Uno de los temas de la semana vinculados al clásico fue la viralización de un video sobre la arenga que dio Jorge Priotti, ayudante de Lucas Bernardi, al plantel antes de salir al campo de juego.
El entrenador leproso se mostró sumamente enojado con quien lo hizo público. “Si encuentro a la persona que ha filtrado ese video, que es alguien que pertenece al club, me aseguraré que no pertenezca más a la institución. Porque es algo nuestro, de nuestra intimidad y en nuestro lugar. Y el que ha pasado ese límite no merece estar con nosotros”.
Y añadió: “Es una cosa muy nuestra y no se hizo en ningún momento para que yo esté hablando de eso ahora. Le digo a esa persona que ha traicionado una forma de ser de este vestuario y también a un grupo que quiere lo mejor para Newell’s. Esa persona nos falló”.