El máximo tribunal dejó firme la decisión de la Cámara Contencioso Administrativo Federal, la cual había anulado la resolución del Ministerio de Justicia, en ese entonces bajo el mando de Germán Garavano, que había rechazado el reclamo de Laplace, como pasó con otros exiliados de aquellos años.
El intérprete y realizador estuvo exiliado en México entre 1975 y 1982 y, como muchos compatriotas, demandó al Estado nacional por la persecución política que sufrió esos años y por los que debió abandonar el país.
Si bien el fallo no establece montos, la Ley de Indemnizaciones para las víctimas de la dictadura establece que se les pagará “la treintava parte de la remuneración mensual” del empleado público del escalafón más alto por cada día que duró el exilio.