Volvieron las Ferias del Trueque donde muchas necesidades conviven en un mismo lugar. En Centeno 671 bis (y la colectora del Acceso Sur), los miércoles, jueves, sábados, domingos y feriados, de 10 a 17, se instala la Feria Villa Manuelita. En poco más de un mes, pasaron de tener 40 feriantes a 820, y tuvieron que sumar días. Los alimentos más buscados: aceite, puré de tomate, arroz, yerba, azúcar y fideos. También aceptan efectivo y transferencias.
En un contexto económico en que el desempleo crece sin pausa, un salario mínimo no alcanza para vivir y crece la pobreza, un peluquero ofrece cortes a cambio de alimentos, otra feriante ropa por comida y así se van cubriendo las necesidades básicas.
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Juan Cruz, responsable de la Feria de Villa Manuelita, contó a El Ciudadano: “Empezamos el 5 de mayo pasado. Nos juntamos para trocar y vender productos que no usamos. Comenzamos con 40 personas, y hoy somos 820. Estamos los miércoles, jueves, sábados, domingos y feriados, de 10 a 17”.
«Viendo las necesidades que hay en mi barrio, como en muchos, convoqué a vecinos y amigos para instalar la feria del trueque en este predio», rememoró Juan.
El referente del lugar explicó que hay reglas de convivencia para vender y trocar: “No se pueden vender alimentos y medicamentos que vengan del Estado, ni nacional, ni provincial ni municipal. Los feriantes traen su ropa que ya no usan como abrigos, zapatos, y lo cambian por arroz, puré de tomate, lo que más buscado es el aceite, puré de tomate, yerba, azúcar, fideos y arroz”.
La mayoría de los feriantes son de la zona, pero los fines de semana se suman vecinos de barrio La Sexta, Alvear, de Villa Gobernador Gálvez, y muchos feriantes nuevos.
María, una de las feriantes, explicó que está en la feria desde el primer día. “Traemos ropa para vender, usada y nueva, y también trocamos calzados, ropa, medias, gomitas para el pelo, guantes, gorras, cosas para la cocina, juguetes, todo en buen estado; o lo compran o lo cambian por otra cosa. Y además tenemos el rincón de los niños para que puedan pintar y dibujar”.
Y siguió: “La gente busca mucha mercadería, acá los alimentos están más baratos que en el almacén o el supermercado”.
“Troco y vendo ropa de niños y billeteras, entre otras cosas. La feria es una fuente laboral muy importante para mí, soy mamá sola con dos hijos”, contó Marina, que tiene un puesto de ropa, que sus hijos que ya no usan.
Y cerró: “Hace un mes le pude comprar una cucheta a mis hijos, camperas, con lo que vendo y cambio. A veces compro frutas, verduras, o un corte de pelo para mi hijo, voy variando según las necesidades”.
Algunos precios
*Papel higiénico y rollo de cocina: $1500
*Limpiador Harpic: $2500
*50 bolsas 60 x 90 cm: $3000
*Sopapas: $500
*Limpia metales: $2000
*Desodorante Impulse: $1500
*Desodorante Dove: $1500
*Borcegos: $2000
*Campera: $2000
*Jean: $1000
*Zapatillas: $4000
*Pullover: $2000
*Botas: $2000
*Prendas de bebé: desde $500
*Aceite: x 1,5: $2600
*Harina pizza: $1500
*Yerba: $1500
*Fideos: $850
*Harina común: $650
*Puré de tomate La Huerta: $850
*Jugo Baggio: $1300
*Azúcar: $800
*Jugo Tang: $350
*Mate cocido: $850
*Fideo moño: $1200
*Banana x 1 kg: $900
*Bananas x 2 k:g $1500
*Mandarinas: 2 kg x $1000
*Manzanas x 1 kg: $1000
*Naranjas x 1 kg: $1000
*Chori + vaso de gaseosa: $2000
