Una de las grandes sorpresas del tratamiento del paquete fiscal en el Senado fue el naufragio del capítulo referido al Impuesto a las Ganancias. Todo indicaba que la restitución a la cuarta categoría sería un hecho, pero esa parte del proyecto recibió un pulgar hacia abajo. Al respecto, desde el gobierno de Santa Fe advirtieron que la alternativa podría resultar más perjudicial a largo plazo para un grupo de trabajadores.
Cabe recordar que en su momento, durante la gestión económica de Sergio Massa, el gobierno dispuso la eliminación de Ganancias para la cuarta categoría. Ese tributo fue sustituido por el Cedular, con el objetivo de que alcance solo a contribuyentes de altos ingresos. Pero el parámetro utilizado, el Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM) sumado a los elevados índices de inflación durante el primer cuatrimestre, afectaron a un sector de trabajadores que no estaban en los planes iniciales.
“El Cedular puede resultar más nocivo que Ganancias. Cada vez más trabajadores van a ser afectados por ese tributo, de hecho ya está alcanzando a personal del Estado”, aseguró el ministro de Economía santafesino, Pablo Olivares, durante una reunión con periodistas a la que tuvo acceso El Ciudadano.
El impuesto mencionado se incorporó con la eliminación de Ganancias con el objeto de gravar a los trabajadores en relación de dependencia, jubilados y pensionados de privilegio con mayores ingresos. Se aplica sobre todos los sueldos, jubilaciones y pensiones con algunas excepciones de puestos jerárquicos que superen los 180 Salarios Mínimos anuales (15 por mes), con alícuotas progresivas de entre el 27% y el 35%.
Al respecto Olivares, detalló: “Si el Ejecutivo decide seguir pisando el valor del SMVM en este contexto inflacionario, muchos trabajadores van a terminar pagando el Cedular. El Mínimo aumentó 50% este año contra una inflación de más de 80% y una suba de esta variable no parece estar entre las prioridades del gobierno nacional”.
Los primeros cálculos estiman que actualmente lo están pagando salarios brutos que superan los $2.300.000. La particularidad de este gravamen es que no permite deducciones, como suelen hacer quienes pagan Ganancias. Aunque establece una escala progresiva según ingresos, que arranca con una alícuota del 27% y no del 35% como sucedía con Ganancias.
Desde el gobierno provincial no hubo un apoyo firme a la restitución de Ganancias para la cuarta categoría. Si bien la quita significó un duro golpe para las arcas santafesinas, el gobernador y sus funcionarios no quisieron exponerse al costo político que generaría reclamar la restitución. En su lugar se elevaron propuestas alternativas como la coparticipación del Impuesto al Cheque, aunque la iniciativa no pasó el tamiz de Casa Rosada..
El gobierno insistirá con Ganancias
Pese al revés que recibió en la Cámara de Senadores, el gobierno de Javier Milei insistirá con introducir las modificaciones que pretende para Ganancias y Blanqueo y de esa manera aprobar completo el Paquete fiscal que inicialmente recibió el visto bueno de Diputados.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ya manifestó su optimismo sobre el tratamiento de estos temas nuevamente en Diputados. Al respecto sostuvo que el recinto terminará aprobando el proyecto original y se refirió a un acuerdo con gobernadores que se verán beneficiados con esos recursos nuevamente.
Cabe destacar que actualmente el tributo alcanza a quienes perciben un salario bruto por encima de los $3.500.000. Mientras que el proyecto oficial establecía un nuevo esquema en el que pagarían con un salario bruto de hasta $1.800.000 o una remuneración neta de hasta $1.494.000. Por su parte, un empleado casado con dos hijos menores a cargo, quedaba eximido del pago del impuesto con un salario bruto inferior a $2.400.000, es decir un sueldo neto de 2.081.277 pesos.
