Desde que asumió la presidencia Javier Gerardo Milei, mes a mes, los números económicos son un golpe constante a las familias argentinas. Según un estudio, más del 54% de los hogares del país destinan entre el 20% y el 40% del total de sus ingresos para pagar deudas. Lejos del crecimiento en “V” promovido por el gobierno, 9 de cada 10 hogares se encuentran endeudados.
La situación económica de la sociedad argentina es cada vez más alarmante, aunque desde Casa Rosada decidan negarlo. Son cada vez más los estudios que demuestran el deterioro del bolsillo de los argentinos. Desde el Departamento de Estadísticas del Centro de Almaceneros y Comerciantes Minoristas de la provincia de Córdoba, se realizó un estudio a nivel nacional que determinó que más de la mitad de las familias utiliza sus ingresos para cancelar deudas.
Muy lejos del crecimiento de la economía “como pedo de buzo” que señalara Milei en una de sus apariciones públicas, los datos demuestran que en el 18% de los hogares encuestados, las deudas representan entre el 40 y el 50% de sus ingresos, un 12% supera el 60%, y un 6% utiliza casi todo lo que ingresa en cancelar deudas.
En época de crisis, donde la inflación está lejos de aplacarse y con salarios por el piso, la tarjeta de crédito es la herramienta utilizada para solventar gastos. El estudio señala que el 26% de los hogares, afirmó mantener deudas por utilizar este método de pago. Penosamente un 54% de los encuestados señaló que esa deuda es para comprar alimentos, lo que demuestra que comer cada día es más un lujo, en la Argentina gobernada por La Libertad Avanza. Los constantes aumentos en la nafta hacen que los automovilistas utilicen para pagar este costo la tarjeta, y eso quedó claro en el 16% de las respuestas. En un 12% se usa para impuestos y servicios, y para la compra de ropa apenas un 11%.
Por si fuera poco, los datos destacan que un 10% recurrió a préstamos de dinero por parte de otro familiar, y otro dato desbastador muestra que el 37% de los encuestados posee una refinanciación de deuda con su banco por el pago de la tarjeta de crédito.
Para colmo, los aumentos no cesan y la inflación en la primera semana de agosto en alimentos fue del 1%. Esto se agrega a la suba del 4% en luz y gas se le sumó un 37% en el transporte público del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y el 3% en los combustibles. Es decir, ya hay especulaciones privadas de que el número de la inflación en agosto rondara en el 5%. Muy lejos del crecimiento en “V” que promovía Milei, o de su deseo para que le den el Nobel de economía, lo único que ven las familias argentinas es que mes a mes, realizan más malabares para no caer en la pobreza y se endeudan para poder comer.
