El director de la Policía Judicial de Córdoba, Federico Storni, expuso en Rosario sobre la experiencia, que lleva ya 30 años, de la provincia mediterránea en la creación de un cuerpo especializado dedicado a la investigación de crímenes y delitos, en momentos en donde un incipiente organismo de características similares está naciendo en Santa Fe por orden del gobernador Antonio Bonfatti y otro proyecto aún se discute en la Legislatura santafesina.
“La Policía Judicial no es nada más ni nada menos que el órgano de investigación del Ministerio Público. Lo único que hace es proveer de manos y pies a los fiscales. El fiscal es el principal responsable de la persecución penal y en tal sentido es quien dirige la investigación y requiere nuestra intervención. Si yo tuviera que definir qué persigue la Policía Judicial, persigue pruebas, no delincuentes. Nuestra misión institucional es reunir y analizar los elementos que den base a los señores fiscales para que ellos puedan formular una hipótesis acusatoria mediante la cual demandan una decisión justa ante un tribunal de juicio”, explicó en diálogo con El Ciudadano.
Storni destacó “la necesidad de contar con una Policía Judicial que permita explotar todo lo que la ciencia, la técnica y el arte nos permiten para poder desentrañar el misterio que plantea la ocurrencia de un hecho criminal”.
“La existencia de una Policía Judicial atenida a reglas de ciencia y de técnica, evita y limita la existencia de subjetividades y por ende de la arbitrariedad. La idea es que nosotros no estamos para ser buenos ni malos, simplemente para ser justos. Por lo tanto, el esfuerzo mancomunado es bajo la guía del fiscal, el principal protagonista, el más importante en el proceso, ya que representa los intereses de la sociedad, no del Estado. De ahí su valor para reclamar ante los tribunales una decisión justa que sólo puede estar basada en pruebas y esas pruebas son colectadas conforme a la estrategia investigativa planteada por el fiscal de instrucción”, sostuvo el funcionario cordobés.
“Ustedes lo están haciendo ahora, la función de investigar, perseguir y acusar está en un cuerpo especial de ciudadanos y la de juzgar y punir está en otro cuerpo, pero todos en el ámbito del Poder Judicial. Por lo tanto, las funciones son completamente diferentes. Diferente al sistema que veníamos teniendo con anterioridad, en el cual el juez investigaba y luego se ponía la toga y juzgaba sobre lo que él mismo había investigado”, agregó en relación al nuevo sistema penal santafesino.
“Pero antes de ese proceso ¿la investigación quién la hacía? En todos los países latinoamericanos lo hacía la Policía común y terminaba el Poder Judicial juzgando lo que la Policía investigaba. No se tenía iniciativa propia”, explicó.
“En definitiva el proceso penal tiene un solo insumo: la información. Y un solo problema: la disponibilidad de esa información. El policía judicial organiza esa información porque el fin del proceso es la averiguación de la verdad. Y la verdad es una cuestión de percepciones, de la manera en que el fiscal debe poder ver para poder elevar una hipótesis acusatoria por la cual demanda al tribunal una decisión justa sobre el problema que está tratando”, expresó Storni.
“Los futuros posibles son muchos, pero el futuro es uno solo, la diferencia entre el soñado y el real es lo que hacemos hoy. Por eso creo que tienen que arrancar de una buena vez, nosotros hace 30 años que arrancamos y todavía no terminamos de tomar velocidad. Nos falta mucho, tenemos muchos problemas, tratamos de solucionarlos pero vamos conformando una sociedad que es respetuosa de los principios que hemos concebido”, dijo el titular de la Policía Judicial de Córdoba.
“Hoy en día la investigación del crimen no es a través de que vaya el cabo Gómez a preguntarle a alguien si sabe algo. El curso de entrevista interrogatoria tiene muchísimas horas cátedras solamente para que los detectives nuestros salgan a preguntar a la calle. Los cromatógrafos los manejan doctores en Ciencias Químicas, se necesita hoy en día una preparación muy especial para poder perseguir al crimen conforme al Estado de Derecho democrático. Si ustedes quieren seguir a los sopapos, es la elección de ustedes”, cuestionó.
“Que todavía no lo hayan hecho, perdónenme, es porque no han querido hacerlo. Esto es decisión y coraje. Es imposible hacer un puchero distinto con los mismos ingredientes de siempre. Estamos en otra época, estamos todos comunicados con la súper tecnología y resulta que mandamos al cabo Gómez para que nos diga cómo hay que investigar los delitos. Es una locura seguir insistiendo así”, explicó Storni.
“Estamos haciendo el futuro y hay que tomar decisiones y prontamente, hay que arrancar, no se puede esperar, esto ya no es para improvisados”, interpeló Storni y concluyó: “No sé cómo pueden seguir juzgando en esta provincia, una provincia tan rica y con tantos recursos como Santa Fe, sin una Policía Judicial. Me resulta inexplicable”.
«Aumentar la eficacia»
El fiscal Federico Storni se refirió a la analogía entre combate del delito y aumento de las penas, tan en boga en nuestra sociedad donde un sector de ella plantea el endurecimiento de las condenas como forma de combatir la criminalidad. «Aumentar las penas de los delitos no hace mella, el delincuente no anda leyendo el Código Penal, no anda con el Código Penal en el bolsillo, pero lo que sí sabe es que si somos eficientes en la persecución, lo vamos a agarrar. Entonces hay que aumentar esa eficacia», concluyó.