Siempre atenta a los cuidados de su cuerpo, la misionera Ingrid Grudke, de 47 años, dejó su carrera como modelo de pasarela para enfocarse en un nuevo desafío. Ahora compite en torneos de fit model y le va muy bien. Durante una entrevista en Desayuno americano (América), Grudke reveló que hace una dieta especial para poder tener la figura que requiere esta singular competición.
“Vengo de un mundial de fit model, que siempre explico de la manera más simple que se trata de una categoría dentro del fisicoculturismo. Se empezó a practicar en 2015 y no se usa la suplementación química ni la hipertrofia muscular, lo que hace al cuerpo más elegante”, explicó Ingrid respecto de esta competencia.
“Empecé a practicarlo hace tres años, por mi coach que es Analía Galiano, que ella sí es fisicoculturista. Su categoría es body fitness, y después está bikini que es otra categoría, y después está wellness, que son las chicas de piernas y glúteos y se empezó esto de fit model, que se practica de una manera más elegante”, agregó.
Al parecer, esta nueva etapa de su carrera en el modelaje comenzó durante la cuarentena. “Yo venía de viajar por el interior como hacíamos siempre, todos los fines de semana desfiles en dos o tres provincias diferentes, en todo el país, bueno, actividad, teatro, un montón de cosas y de golpe estuvimos todos encerrados. Para mí era como un descanso de viajar, estar un poco en casa”, contó.
Pero ese tiempo libre lo usó para entrenar. Ahí encontró a su coach, Analía, y todo fue muy progresivo. Luego siguió una dieta estricta que incluye licuados de carne. “Si digo, se comen las entrañas de los animales, el chinchulín, la tripa gorda, ¿cómo no puede ser un licuado de carne que lo recomendó un nutricionista? Suena fuerte porque estamos acostumbrados al licuado dulce, de banana, de fruta, lo que sea, la carne hecha que a veces se pone durita, la procesás, le ponés un poco de agua, miel y… ¡adentro!”, aseguró ante el asombro de los periodistas presentes en el piso de América.
“Es carne sin grasa, lomo, pollo, carne magra, esto me lo dio un nutricionista hace unos años y es mucho más común de lo que la gente cree. Lo tomo frío porque si lo tomás caliente, es una sopa”, finalizó.