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La fábrica de cosechadoras Vassalli de Firmat sigue a la espera de un inversor

Desde el gremio mercantil dijeron que la empresa mantuvo reuniones pero aun no cerraron acuerdos. Los 300 trabajadores redujeron la jornada y esperan el cobro de salarios adeudados por cerca de 70 mil pesos

La  fábrica de cosechadoras Vassalli, de la localidad de Firmat, sigue a la espera de inversionistas para repuntar el funcionamiento de la planta. Hace más de un año, el 60 por ciento de las acciones de la empresa volvió a manos de la nieta del fundador, Mariana Vassalli, que las había cedido dos años atrás a un grupo de concesionarios. Desde que la empresa entró en concurso de acreedores los 300 trabajadores de la planta redujeron las jornadas laborales de 8 a 6 horas. Además cobran los salarios con atrasos y les deben entre 70 y 90 mil pesos a cada uno.

“Hubo reuniones entre grupos inversionistas, la empresa y el gremio. No hay nada cerrado todavía. Seguiremos en tratativas con todos los actores. Soy optimista, pero no hay que generar falsas expectativas”, dijo a <El Ciudadano>, Pablo Cerra, abogado de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).

La empresaria firmatense tomó el control del 60 por ciento del paquete accionario. Su misión es conseguir nuevos inversores para que puedan reactivar las operaciones productivas que están en baja por la compleja coyuntura ante la falta de ventas, entre otras cuestiones.

Los empresarios cordobeses Gastón Aguirre, Sergio Barbero y Néstor Girolami se hicieron cargo de la planta de Firmat para sacarla a flote, pero no lo consiguieron. Los dos primeros ya cedieron las acciones. Aún falta Girolami.

“La importante es que haya un acuerdo entre la empresa interesada y Vassalli. Hay que articular entre todos los actores. Mariana tiene la mayoría de las acciones, pero siempre se planteó que ella no iba a explotar la fábrica ni intelectual, ni material, ni económicamente, sino que iba a mediar para llegar a un acuerdo con futuros inversionistas”, resumió el letrado.

Los 350 trabajadores de la planta redujeron las jornadas laborales de 8 a 6 horas. Se les adeuda unos tres meses de salario y desde que la empresa entró en concurso de acreedores (procedimiento que se pone en marcha cuando una persona física o jurídica entra en una situación de insolvencia y no puede hacer frente a la  totalidad de los pagos que adeuda), tienen que cobrar entre 70 y 90 mil pesos cada uno.

“La empresa vende el romanticismo de la marca. Los gringos son conservadores en todo sentido. No es que la fábrica no pueda funcionar. Es muy importante invertir en innovación y tecnología para generar confianza”, sostuvo Cerra.

El abogado de la UOM aseguró que la planta firmatense tiene que empezar de cero. “Es complejo el esquema de la empresa. Está concursada y tiene una masa de acreedores que tienen que aceptar la situación”, advirtió.

 

La voz del gremio

 

Diego Romero, representante de la UOM Firmat, dijo que seguirán las negociaciones con los posibles inversionistas. “En las reuniones que mantuvimos propusieron jornadas laborales de cuatro horas sin pagar deudas post concursadas. Todavía no le podemos reclamar nada. Le exigimos a Mariana. Pero si llega un grupo inversor tendrá que poner dinero de entrada y hacer un plan de pago con lo que se adeuda”, señaló.

Romero explicó que la situación de Vassalli es muy compleja. “Se necesitan comprar insumos destinados a apuntalar las actividades productivas. Desde hace cuatro años que venimos a los ponchazos. Las últimas máquinas se fueron al país sudafricano de Angola, en septiembre. La fábrica está sin cabeza y a la buena de Dios”, explicó.

 

El conflicto

 

La crisis de Vassalli se extiende desde hace tiempo. Desde 2017 los nuevos titulares de la firma habían planteado la necesidad de ofrecer retiros voluntarios para achicar el plantel de 500 trabajadores con el que contaba la empresa, al considerar que la cantidad de empleados no era compatible para sostener el funcionamiento. Eso generó el conflicto que luego se agudizó con la falta de pago del salario de los obreros desde febrero de 2018.

 

La historia

 

Vassalli es una de pocas fábricas de cosechadoras del país y emplea actualmente a 300 operarios. Fue fundada en 1949 por Roque Vassalli cuando trasladó un taller de reformas desde la Cañada del Ucle, en el departamento General López, para armar en Firmat una planta modelo. Pronto se transformó en polo de desarrollo tecnológico y productivo a escala nacional. En la actualidad está en manos de los distribuidores cordobeses que compraron el 75 por ciento a los descendientes de don Roque. El 25 restante quedó en manos de la familia.

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