Por Gerónimo de Moya
Este fin de semana estuvo lleno de sol, arena y también handball de playa en La Florida. Arrancó el sábado bien temprano, incluso antes de que se abriera el ingreso al público, con los chicos del equipo Shoot Out terminando de afinar detalles para el arranque del torneo. Poco a poco, la mañana se fue colmando de gente que fue a la costa del Paraná a tomar sol, otros que exclusivamente se acercaron para ver los partidos y algunos curiosos que ante los giros, los saltos y las musculosas coloridas de los equipos se detuvieron a ver un juego que no terminaban de entender pero les despertaba la curiosidad. Otros pasaban y se preguntaban qué deporte era ese que se juega con una pelota pequeña y tres jugadores y un arquero por lado. Los más chicos fueron los más sorprendidos con el beach handball. Hasta el punto de que varios se “anotaron” incluso como alcanza pelotas en los lanzamientos que se perdían entre la multitud que disfrutaba del buen clima. La jornada continuó bajo cielo radiante y con una arena que, pasado el mediodía, empezaba a picar, lo que obligó al constante regado de la cancha partido tras partido. Así, hasta que el sol se escondió en el horizonte para alivio de jugadores y público.
Dos días insumió el torneo Tata Martino, organizado por Newell’s y Shoot Out. El domingo arrancó nublado, con el termómetro marcando una líneas menos que la víspera, y con un cronograma que combinó partidos para determinar los últimos puestos de las categorías masculino y femenino con los correspondientes a las semifinales.
En mujeres, se midieron para llegar a la definición final Shoot out Rosa y Shoot Out Celeste por un lado, y Central Córdoba contra Newells en el otro cierre. En varones, los pases se dirimieron en los encuentros de Shoot Out Sub 17 y Fernetudos y, en el otro bracket, Shoot Out con Troya Beach, en lo que fue el mejor partido del torneo.
Luego de un receso de una hora y media para que árbitros y jugadores pudieran comer y refugiarse del sol, se disputaron los encuentros para determinar el tercer puesto de ambas ramas. En mujeres, el bronce se lo quedó Shoot Out Celeste tras vencer a Newells. En varones, ese lugar lo ocupó Troya Beach al derrotar a Shoot Out Sub 17. Para este momento, La Florida lucía mucho más poblada que el sábado. Y más interesados y curiosos se acomodaban para ver los encuentros. Incluso, los que por la pasarela emprendían el retorno a sus casa y hacían un alto ante el espectáculo.
Ya sobre las 17.30, las chicas de Shoot Out Rosa y las charrúas de Central Córdoba ingresaban a la cancha –la misma arena, delimitada por flejes– para la final femenina. Shoot Out venció por 2 sets a 0 y así se consagró nuevamente como campeona del torneo rosarino.
El festejo se entrelazó con la preparación de los chicos de Shoot Out y Fernetudos para la final masculina. Otro intenso partido que tras igualar 1 a 1 en sets, se resolvió mediante shoot outs. Ahí, la victoria se la llevó Fernetudos, que además se consagró campeón por primera vez.
Pese a la competitividad lógica del deporte y al deseo de ganar de cada equipo, lo que primó fue el respeto y la buena onda entre los jugadores, lo que no impidió el derecho a algunos reclamos para con los árbitros o faltas un poco subidas de tono.
Al final del torneo, más allá de ganadores y vencidos circunstanciales, hubo sonrisas, felicitaciones y la alegría de haber protagonizado dos jornadas de un deporte amateur sin prensa que sigue sumando adeptos en la ciudad gracias al trabajo y esfuerzo de los propios jugadores: a pulmón, con casi nula ayuda económica, son los que multiplican su tiempo para entrenar y a la vez organizar torneos que permitan difundir el juego que aman.
Cómo se juega, cómo se anotan los tantos y cómo se define un partido
El Beach Handball es un deporte muy dinámico y con reglas que favorecen al espectáculo para quienes lo observan. Su mayor particularidad es la forma de convertir goles, ya que pueden valer 2 puntos o 1 dependiendo de la forma en que el jugador convierte. Si lo hace realizando un giro de 360° o agarrando la pelota en el aire y lanzando antes de tocar la arena, lo que en beach se conoce como “Fly”, valdrá doble. Ahora, si el lanzamiento es normal como se suele ver en el handball tradicional, solo valdrá uno. A menos que quien convierta el tanto sea el jugador “Especialista”, en cuyo caso siempre se contarán dos puntos.
El juego se divide en dos sets independientes de 10 minutos cada uno. Si un equipo gana los dos sets, se le dará por ganado el encuentro. Pero si cada uno gana uno, el partido se definirá por “Shoot outs”, un mano a mano entre jugador y arquero con la misma regla de goles dobles y simples.
En Rosario, este deporte lleva varios años practicándose. En 2019, luego de lo que fueron los Juegos Sudamericanos de Playa desarrollados en la ciudad, la Asociación Rosarina de Handball decidió abrir una escuelita de Beach Handball gratuita en La Florida, la primera pública en todo el país. Hoy funciona en otro lugar, el complejo de La ex Rural ubicada en los bulevares Oroño y 27 de febrero. Se trata de las instalaciones que quedaron de los Juegos Sudamericanos de la Juventud 2022.
Además, a través del programa CREAR (Centro Regional de Alto Rendimiento), se han llevado a cabo campus de entrenamiento de los que participaron chicos de toda la ciudad y que contaron con la participación de Leticia Brunati, coordinadora de las selecciones nacionales y entrenadora de la selección Juvenil argentina de beach handball, sin duda una gran apuesta para el crecimiento del deporte en la ciudad.
