Después de una semana violenta en la capital provincial, donde se registraron siete asesinatos en siete días, el Arzobispado de Santa Fe y el Consejo Presbiteral difundieron un documento en el que llaman a la reflexión sobre el origen de la desigualdad y la exclusión social.
Firmado por el arzobispo de Santa Fe, Sergio Fenoy, el documento se hace eco de la ola de crímenes (71 homicidios en lo que va del año en el departamento La Capital) y afirma que la Iglesia debe “estar cerca de aquellos que atraviesan estas situaciones dolorosas y asegurar nuestra oración a los familiares de las víctimas, especialmente a través de todas nuestras parroquias”.
Además, remarca que “las causas de tanta violencia son múltiples” y hace un llamado a toda la sociedad santafesina a “poner manos a la obra para que todos puedan tener la educación, la salud y el trabajo digno que promocione a las personas y las ayude a salir de la exclusión social”.
“En muchos lugares –continúa– pareciera que cada uno puede hacer lo que quiera, donde la impunidad genera violencia, miedo, descontento social y es la mejor aliada de la corrupción”.
En otro tramo del escrito, el arzobispo de Santa Fe hace un “llamado urgente y respetuoso a las autoridades y a quienes han sido elegidos, tanto a nivel municipal como provincial, para que se resguarde la seguridad de todos los vecinos de nuestra ciudad y también atiendan las causas de la misma”.
