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En una nueva conmemoración del Día Internacional de la Mujer el área correspondiente de la Municipalidad sigue creando programas en defensa y reivindicación de los derechos de la mujer. Además de una extensa grilla con variadas actividades que comenzaron ayer, la lucha por la igualdad de géneros y la defensa del mal considerado “sexo débil” seguirá intensificándose durante toda la semana (ver aparte). Silvina Santana, una de las responsables de toda esta movida, manifestó que a lo largo de las últimas décadas hubo muchos logros en materia de integración de la mujer a la sociedad y la política, “pero aún falta mucho por hacer y obtener”.
Santana es coordinadora del Área de la Mujer, dependiente de la Secretaría de Promoción Social municipal. En diálogo con El Ciudadano, la funcionaria expresó: “Hoy se puede ver que con el paso de los años hay leyes, hay programas de los estados, tanto municipal como provincial y nacional donde las mujeres vamos ocupando distintos espacios. En este sentido quisimos (desde el área) homenajear a las mujeres este 8 de marzo en su lucha, en su reconocimiento y en la posibilidad de generar distintos proyectos, pero sabemos que aún falta mucho”.
En medio de las metas no logradas, Santana apuntó sobre la violencia contra la mujer: “Seguimos conociendo casos de violencia contra las mujeres. Sabemos de casos que se publicaron en los medios de comunicación y eso nos demuestra que aún hay mucho por hacer. Nos comprometemos y cada 8 de marzo renovamos este compromiso para seguir en la lucha por la igualdad entre varones y mujeres y de alguna manera contribuir al cambio de pensamiento cultural, en las relaciones entre sexos para evitar la violencia y para que las mujeres tengamos las mismas oportunidades”. Respecto a su labor, expresó que para el municipio, y el área en sí, “es un desafío poder seguir abarcando las problemáticas de género o profundizando aquellas desde que hace años trabajamos, como el caso de la violencia. Allí falta más decisión y trabajo. Por suerte los medios de comunicación hablan menos de crímenes pasionales y sí de violencia a la mujer –como debe nombrarse– y cada vez más mujeres se animan a denunciar la violencia que reciben de su pareja”.
A su vez, el trabajo de la oficina dedicada a la realidad femenina promete seguir trabajando e incorporando políticas nuevas, como la igualdad en el empleo, ya que en muchos trabajos “la mujer no cobra lo mismo por la tarea idéntica que realiza a la par de su compañero varón”.
Otro de los puntos a analizar es el trabajo doméstico. “Si las mujeres pretendemos trabajar en el ámbito público, en política o en organizaciones sociales, tenemos que tener resuelto nuestro ámbito doméstico, si no terminamos con una triple jornada laboral y eso no es justo”, expresó.
Por su parte, y de acuerdo a lo estipulado en conjunto con el Programa de Políticas de Género para Adolescentes, dependiente de esta área, se trabaja con jóvenes en la capacitación en educación sexual. “En medio de tantos programas tenemos el de capacitación de educación sexual, donde chicos y chicas adolescentes aprenden de sexo sin tabúes y cómo capacitar a sus pares en el colegio, buscamos la posibilidad de poder ejercer nuestra sexualidad libre, y en un marco de respeto. La mujer tiene que crecer y desarrollarse donde no haya violencia sexual, donde no haya abuso, donde las adolescentes si son madres, lo sean por decisión propia y no por un descuido, o por no saber cómo cuidarse. El concepto de una planificación familiar es necesario y trabajar sobre los derechos sexuales es un punto que nos llevará tiempo, pero podremos llegar a buen puerto”, explicó.
