La inflación de junio (3,7%) fue la más alta de los últimos dos años y el acumulado del primer semestre (16%) ya superó el total proyectado por el gobierno para el año (15%). La aceleración inflacionaria se dio como consecuencia de la fuerte devaluación de mayo y junio, impulsada especialmente por el alza en alimentos, transporte y prepagas, según informó este martes el Indec. En los últimos doce meses, el alza de precios minoristas alcanzó el 29,5%, según las cifras oficiales.
En el indicador de junio impactaron fuerte el alza del 5,2% en el rubro de alimentos y bebidas (totalizó 17,3% en los primeros seis meses del año).
También crecieron fuerte en junio el rubro transporte, con una fuerte alza del 5,9%; salud, con suba del 4,3%, por los incrementos en las cuotas de prepagas; y equipamiento y mantenimiento del hogar, con un 4%.
El impacto de la devaluación llevó al índice de junio a ser el más alto de los dos últimos años, considerando que en mayo del 2016 se había ubicado en el 4,2%.
El resto de los sectores se ubicó por debajo del nivel general, con aumentos del 3,4% en recreación y cultura, 3,2% en otros bienes y servicios y 2,7% en vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles.
Las alzas menores fueron para prendas de vestir y calzado (1,9%); educación (1,2%); bebidas alcohólicas y tabaco (0,9%) y comunicación (0,4%).
Región por región
En el Gran Buenos Aires, la inflación rozó el 4 por ciento y se ubicó en 3,9%, siendo la variación más alta en todo el país.
Le siguieron el alza de precios minoristas en la Región Pampeana, con 3,7%; Cuyo, 3,6%; Noroeste, 3,4%; la Patagonia, 3,3%; mientras que el indicador más bajo fue para el Noreste, con 3,1%.
En los primeros seis meses del año la inflación acumulada más alta corresponde a la Patagonia, con 16,8%; le siguieron la región Noroeste, 16,6%; el Gran Buenos Aires y la Región Cuyo, con un alza del 16%, mientras que en la Pampeana el indicador llegó al 15,9% y al 15,7% en el Noreste.
En la medición interanual, la región Pampeana alcanza un 30% de aumento acumulado en precios minoristas, y es seguida por el Gran Buenos Aires y Cuyo con 29,5%, la Patagonia con 29,1%, el Noroeste con un 28,6%, y el Noreste, con el indicador más bajo en la comparación de los últimos doce meses con un 26,4%.
Inflación núcleo
La denominada inflación núcleo, que es la que tiene en cuenta el Banco Central para fijar las tasas de política monetaria, se ubicó en el 4,1%, casi duplicándose respecto del 2,7% de mayo pasado.
En los últimos doce meses los precios regulados (que incluyen las tarifas de servicios públicos) son las que más impactan en el indicador con un aumento interanual del 41,2%, seguido de los precios estacionales, con un 22,2%, y los desestacionalizados, con un alza del 2%.
Los precios de los alimentos suben por encima del promedio
Los precios de los alimentos aumentaron 27,5% desde junio del 2017 y 17,3% en el primer semestre, aunque los mayores aumentos en este último período se dieron en la lechuga (67,1%), la harina (90%) y los huevos (53%).
En junio, con un aumento del 5,2% respecto de mayo, impactaron fuerte el alza el precio del kilo de tomate redondo (54,5%) y el de la harina de trigo común (25,8%); el de la banana (12,2%); aceite de girasol de un litro y medio (11,8%) y pan francés (10,8%).
De los 60 productos que releva el Indec en su canasta de alimentos, únicamente mostraron bajas cuatro productos, la naranja (-18,2%), la lechuga (-18,4%), la papa (-1,2%) y el limón (-7,6%).
Los 56 artículos restantes mostraron subas por debajo del 10% y casi la mitad incrementos por debajo del 5%. El aumento del precio de estos productos está relacionada principalmente con el tipo de cambio, la estacionalidad y los productos que se exportan a un precio que impactan en el mercado interno por la suba del dólar.