El cantante uruguayo pasó por el Teatro El Círculo, el martes a la noche, con su espectáculo “Mundo abisal”, con un teatro totalmente lleno. El público estaba dispuesto a escuchar las mejores canciones de Jorge Drexler y el músico volvió a presentarse como en sus primeras visitas a la ciudad: solo, acompañado por una puesta tenue y bella, parado en el centro del escenario, con una puesta mínima dominada por dos lámparas colgadas y un foco desnudo.
Drexler instalado entre guitarras, con jean, zapatillas y saco negro, corbata prolijamente desanudada y las canciones que todos quieren escuchar y hasta un homenaje para Zitarrosa. Los temas van en un recorrido por sus veinte años de buenas letras y de amables melodías. Todos cantan juntos. El músico gusta de los sonidos delicados y logra que el público cante sin estridencias. Drexler se corre del micrófono para cantar a capella, íntimo, como en una reunión de amigos, de viejos amigos, con esa comunicación fluida que logra con sus seguidores.
Sea, Todo se transforma, Amar la trama (más que el descenlace), son las canciones cantadas por todos. El público lo sigue satisfecho. La platea del concierto está compuesta en su mayoría por mujeres de todas las edades, y algunas parejas que disfrutan por igual, entre ellas, la Intendenta Mónica Fein y su marido aplaudieron sonrientes.
Después de dos horas de concierto, la gente salió del concierto con una agradable sensación en el alma, quizás sea por que las canciones de Jorge Drexler provocan una estado de placentera belleza y 1200 personas fueron partícipes de esa clara comunición entre el artista, solo con su guitarra, y sus seguidores, íntimo y próximo, a capella, parado al borde del escenario, porque según su opinión, lo que más le interesa es la trama y no el desenlace.