Desde la Municipalidad de Rosario anunciaron una sanción contra la empresa Rosario Bus, luego de que una joven fue bajada de un colectivo por viajar con su gato, y por ese motivo hizo la denuncia.
“No debería haberse bajado a la usuaria”, sentenció Ezequiel Escobar, del Ente de la Movilidad, en diálogo con El Tres, y puso además en tela de juicio “el comportamiento del conductor” en base al testimonio de la damnificada, que deslizó un maltrato.
“Como ente de contralor de las empresas, vamos a sancionar a Rosario Bus y después la empresa verá la medida que toma con su dependiente”, agregó el funcionario municipal.
Sobre la normativa vigente, remarcó que desde 2015 “se puede” viajar en colectivos urbanos con mascotas “pero con una jaula transportadora según ordenanza” de 2002 luego modificada, que especifica varios puntos como el tamaño de dicho canil, que como máximo debe medir 50 x 30 x 30 centímetros. La excepción son los canes lazarillos, que pueden ir sueltos.
“Sirvió este caso para que el Concejo pudiera aclarar la normativa”, dijo en relación a tratativas que se realizaban este jueves en el Palacio Vasallo para establecer algunos pormenores de la ordenanza, “cuyo espíritu es que puedan viajar con mascotas”, sostuvo Escobar.
Mal trago de trasnoche
El caso que puso el tema en agenda es el de Indira, una joven que días atrás, pasada la medianoche subió con su gato dentro de un bolso especial a un colectivo de la línea 101 negra para volver a su casa.
Contó que cuando el conductor se percató que lo que transportaba era un animal, fue obligada a bajarse a las pocas cuadras, intervención policial mediante.