En un comunicado enviado ayer a los medios, el Colegio de Magistrados y Funcionarios del Poder Judicial de la Provincia de Santa Fe y el Colegio de Jueces Penales de la Segunda Circunscripción Judicial convocaron “a todos los asociados y asociadas, a profesionales del Derecho, miembros de los demás poderes del Estado y a la comunidad toda, a concurrir al acto que se realizará en Defensa del Estado de Derecho, en resguardo de las garantías mínimas para el funcionamiento de la labor jurisdiccional y de investigación frente a la actuación delictiva organizada, y en solidaridad con nuestros compañeros Juan Carlos Vienna y Guillermo Camporini”.
“El descubrimiento de acciones dirigidas a atentar contra la integridad física de jueces y funcionarios judiciales constituye un hecho de grave trascendencia institucional que tiene como antecedente amenazas que se produjeron el año pasado contra dicho magistrado y fiscales”, dijeron.
“Esta modalidad criminal –agregaron–, viene a sumarse al atentado perpetrado contra el gobernador de la provincia y a las amenazas sufridas por funcionarios del Poder Ejecutivo y (de las fuerzas) policiales. Todo conforma un marco de ataques a las instituciones democráticas sin precedentes mereciendo una respuesta cívica madura y contundente de quienes tenemos responsabilidades públicas y de toda la ciudadanía santafesina y nacional”. Los organizadores del acto confirmaron la presencia del presidente de la Corte Suprema, Rafael Gutiérrez, y del presidente de la Federación Argentina de la Magistratura y la Función Judicial, Víctor Vélez. El acto será mañana, a las 12.45, en el hall del Palacio de Tribunales de Rosario.
Las escuchas
La reacción de la Justicia llega tras conocerse el sábado pasado el contenido de grabaciones realizadas por la Justicia federal entre dos presos –Germán Almirón, un oficial de la Brigada Operativa de la División Judicial de la Unidad Regional II, acusado de facilitar la fuga de un sicario de Los Monos, de apellido Ramírez; y Arón Treves, acusado de un asesinato y de trasladar pasta base de cocaína en la zona sur de Rosario–, en las que detallaban la intención de asesinar al juez de Instrucción Juan Carlos Vienna y al fiscal federal Guillermo Camporini, además de un integrante de la División Judiciales, Luis Quebertoque”, ex compañero de Almirón (ver aparte).
Las grabaciones se produjeron en el marco de una investigación que lleva adelante el juez federal Carlos Vera Barros, quien inmediatamente las giró al fiscal general de la provincia, Julio de Olazábal. El fiscal Aníbal Vescovo es quien lleva el caso.
“Hasta que no maten un juez o un fiscal en Santa Fe todo va a seguir igual”, trascendió que habrían dicho.
Sobre el juez, se decía que lo podían “enganchar” cuando salía de Tribunales, y hasta daban precisiones sobre un caniche toy, “con el que sale caminando y se va paseando”. Hasta llegaron a mencionar los apodos de los supuestos sicarios: Anteojito y Crysler.
La defensa del policía Almirón expuso su versión de los hechos
Rodrigo Mazzuchini, abogado defensor de Germán Almirón –el policía implicado en las escuchas que revelan un presunto plan para atentar contra la vida del juez Juan Carlos Vienna y el fiscal Guillermo Camporini–, que además está preso acusado de facilitar la fuga de Domingo Ramírez, un sicario de Los Monos, enmarcó algunas de las afirmaciones que rodean a las escuchas “en una interna de la División Judiciales”, y aclaró que su defendido no fue quien facilitó la fuga de Ramírez.
Además, dijo que no le consta la veracidad de las grabaciones detectadas entre Almirón y Arón Treves, preso en Coronda por homicidio, en las que se detectó un plan para terminar con la vida de Vienna y Camporini.
“Acá hay una interna en Judiciales, una lucha. Salvo el jefe, que es un hombre de bien, el resto han sido convocados por su capacidad investigativa y no de honorabilidad”, le dijo a El Ciudadano Mazzuchini. Según el abogado, consta en el expediente, que está en manos de la jueza Alejandra Rodenas, que su defendido fue “quien detuvo a Ramírez y lo llevó a Jefatura, quedando bajo la custodia de otras personas, a quienes se les escapó”.
“Al otro día –siguió relatando– la pareja de Ramírez lo involucró a Almirón y terminó imputado de extorsión”. Según Mazzuchini, la denuncia es “una cobertura para que cuando caiga Ramírez no digan que se fugó, sino que lo extorsionaron”, y acusó a “Luis Quebertoque, que aparece como una victima de todo esto”, como “el responsable del escape”.
Según las versiones que trascendieron de las escuchas, Luis Quebertoque era otro de los apuntados en el plan contra Vienna y Camporini, bajo el sobrenombre “Judas”.
“Ahí no hay delito”
En relación a las escuchas que trascendieron este fin de semana, dijo: “Primero, no sé si es verdad. No sé el contexto: si son dos presos aburridos, o si están bromeando. No tuve acceso a las grabaciones y no puedo saberlo. Pero, aunque sean verdaderas, como abogado sé que ahí no hay delito, porque en la Argentina no existe el delito de conspiración”.
Mazzuchini también se mostró sorprendido porque su defendido, Almirón, “apreciaba a Camporini”.
“Almirón fue el que hizo la mayoría de las capturas. Para que se entienda, es como un agente de Inteligencia, un hombre con muchos contactos en los «bajos fondos», habla con un montón de malvivientes y eso es lo que necesitaban cuando lo convocaron”.