La emblemática Sala Lavardén, en la esquina de Sarmiento y Mendoza, un espacio que lleva la marca de la cultura de Rosario, reabre sus puertas a la presencialidad y lo hace presentando cuatro ciclos que no llegaron a ver la luz ante la llegada de la segunda ola de la pandemia de covid-19, cuya programación se completará a partir de los proyectos que desde este lunes lleguen de la comunidad artística local y de la región.
Por un lado, se presenta Mucha data, ciclo pensado para que se luzcan las bandas jóvenes del rock y la música ciudadana, un clásico de la ciudad y toda la región.
El segundo de los espacios propuestos se denomina Reír, llorar, amar, con una programación que buscará reafirmar a Rosario como capital del teatro y la danza.
El tercero de los ciclo es Confluencias, y se lanza con la intención de rescatar la diversidad de la música popular. Y en este sentido, el tango, la cumbia, el folclore y el chamamé serán los grandes protagonistas.
Al mismo tiempo, infancias y familias se ponen en juego a partir de Sábados de teatrín, un ciclo de espectáculos infantiles con entrada gratuita, con la intención de privilegiar las infancias en toda su diversidad.
Para el armado de la programación de cada uno de los referidos ciclos, desde este lunes 2 de agosto, se abre la convocatoria a artistas o grupos artísticos. La convocatoria se canalizará a través de la web www.salalavarden.gob.ar y la reserva de entradas deberá gestionarse en www.entradaslavarden.com.
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