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La lucha de las bibliotecas populares sigue en su día

Por Luciana Sosa.- Aquellas repisas en medio de los barrios, con libros que hablan sobre la educación o el ocio, también sostienen una necesidad social fuera de la literatura y se pide un mayor apoyo al trabajo realizado.

Se celebra el día nacional de las bibliotecas populares y se espera al próximo mes para tener un festejo a nivel internacional, dado que octubre es el período dedicado a estos espacios culturales que hacen mucho más que acercar a los vecinos a la lectura. Sin embargo no hay mucho que festejar. Ana María Córdoba, bibliotecaria de profesión y por pasión, remarcó a este medio “la necesidad de derivar fondos a las bibliotecas populares, de apoyarlas en sus actividades y en la formación del personal que allí dedica su tiempo. Si no las apoyamos, van a desaparecer y se perderá un eslabón gigante en la cultura, la educación y la interacción social de los barrios”, advirtió.

La fecha surge en conmemoración del nacimiento de Mariano Moreno (1778 – 1811); quien un 7 de septiembre pero de 1810 fundala Biblioteca Pública, hoy Biblioteca Nacional.

Córdoba expresó que en esta fecha, y mucho más el próximo mes, dedicado de manera internacional a las bibliotecas populares, “es una buena idea pensar en el cuidado que requieren estos espacios, sobre todo teniendo en cuenta de que las bibliotecas populares hoy tienen que ver con la contención, los talleres que se realizan para que los pibes aprendan y no estén tanto tiempo en la calle, los abuelos que se acercan a leer algún clásico y les terminan explicando literatura a los chicos que se acercan a hacer las tareas del colegio. Un clima familiar, si se permite el término, que está siendo amenazado por la omisión de las autoridades, del Estado provincial y nacional”.

En cuanto al rol que cumplen estos espacios, Córdoba remarcó que en muchas localidades pequeñas existe una biblioteca popular pero no dentro de los estamentos educativos, es decir, la biblioteca no integra la escuela primaria ni la secundaria del lugar: “Es increíble pensar que una biblioteca éste fuera del ámbito educativo, cuando se sabe que es un pulmón de la educación. Aquí estamos faltando al proyecto de (Domingo Faustino) Sarmiento, porque él no sólo fomentó las bibliotecas populares sino también Manuel Belgrano y José de San Martín. De hecho, cada vez que San Martín liberaba un país inauguraba una biblioteca pública y eso deberían hacer las autoridades de cada ciudad, de cada pueblo”.

Entre otras mencionó la labor social que lleva a cabo el Centro Comunitario San Francisco de Asís (Travesía 1165), que además de libros tiene tazas y cacerolas, utilizadas en la copa de leche. “Está en medio de Empalme Graneros y del barrio Sarmiento y acude a la necesidad de las dos zonas, no sólo en materia de lectura, de educación, sino como la entrega de la copa de leche”. Por otra parte, la mujer destacó la labor de la biblioteca Pocho Lepratti y su labor social en el rescate de la memoria, además de los cursos de capacitación laboral que realizan junto a los jóvenes del barrio Ludueña, entre sus delgadas paredes.La Gastón Gori(Juan José Paso 7990) yla Cachilo(Virasoro 5606), son otras que levantan la bandera de ayuda social, en paralelo con los cuentos y las novelas.

La Comisión Nacionalde Bibliotecas Populares (Conabip) es el organismo dependiente dela Secretaríade Cultura dela Naciónque fomenta el fortalecimiento de las bibliotecas populares en tanto organizaciones de la sociedad civil, e impulsa su valoración pública como espacios físicos y sociales relevantes para el desarrollo comunitario y la construcción de ciudadanía.

Su función es orientar y ejecutar la política gubernamental, a través de un modelo de gestión asociado que favorezca la consolidación del carácter autónomo de este movimiento social único conformado por más de dos mil bibliotecas y 30 mil voluntarios que, a lo largo y a lo ancho del país, despliegan sus acciones desde hace más de 140 años. Pero allí se hace mucho más.

“Hoy las bibliotecas están abiertas de acuerdo a las poquitas horas que pueden dedicarle, voluntariamente, a la atención de los lectores. Por otra parte, se conocen las herramientas multimedia que hoy se utilizan en materia de comunicación y educación; ¿por qué muchas, casi la mayoría, de las bibliotecas populares no tienen recursos multimedia?, sobre todo conociendo la posibilidad de tener libros publicados en internet. Eso es un coto a la cultura”, manifestó.

Los reclamos continuarán durante octubre, en medio de las actividades previstas para la celebración de la existencia de estos espacios. Como dijera la titular de la Conabip, María del Carmen Bianchi, “la biblioteca popular ha sobrevivido porque no es sólo un espacio físico”.

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