El médico congolés Denis Mukwege y la yazidí Nadia Murad, ex esclava de los yihadistas, quienes han sido nombrados ganadores del premio Nobel de la paz, dijeron este domingo que esperan que el premio contribuya a terminar con la impunidad de los autores de violencias sexuales.
El ginecólogo de 63 años y la joven iraquí de 25 recibirán este lunes en Oslo el Nobel que les fue atribuido de manera conjunta por su lucha contra la violación como «arma de guerra».
«Este premio Nobel no hará desaparecer la violencia ni los ataques a mujeres, mujeres embarazadas, niños, bebés», declaró Nadia Murad a la prensa. «Pero nuestro objetivo es que el premio abra puertas y ya es el caso», agregó.
Como miles de mujeres yazidíes, Nadia Murad fue secuestrada, violada, torturada, e intercambiada entre los yihadistas del grupo Estado islámico (EI), tras su ofensiva contra esta comunidad kurdofona del norte de Irak, en 2014.
Tras lograr escapar, la joven, cuya madre y seis hermanos fueron asesinados, lucha para que la persecución de su gente sea reconocida como genocidio.
«Ningún miembro del Estado Islámico ha sido enviado ante la justicia. Ya no están en Irak pero vemos que las violaciones continúan como arma de guerra», subrayó.
«Aunque 4.300 yazidíes escaparon o fueron comprados al EI, aún seguirían desaparecidos» unos 2.500, según la Federación internacional de derechos humanos (FIDH).
A comienzos de 2019 un equipo de la ONU comenzará, según su jefe, a investigar los abusos de los yihadistas en Irak.
Denis Mukwege atiende desde hace dos décadas a víctimas de violencia sexual en el hospital de Panzi, que él fundó en Bukavu, en el este de la República Democrática del Congo (RDC), región afectada por la violencia crónica.
«La denuncia no es suficiente, es necesario actuar», dijo en conferencia de prensa. «En los conflictos armados, (…) la transformación de los cuepos de las mujeres en campo de batalla es un acto inadmisible en nuestro siglo», agregó.
El premio Nobel de la paz consiste en una medalla de oro, un diploma y un cheque de 9 millones de coronas suecas (unos 872.000 euros).