La madre de Candela Rodríguez, Carola Labrador, desestimó las informaciones acerca de que los investigadores centran sus sospechas en la familia de la menor, acusó a los medios de que «están inventado todo, porque no tienen noticia» y que a su hija la mataron porque los captores «se asustaron» al ver que ella se movilizó tanto para encontrarla.
«Están hablando cualquier cosa, cosas que no son», agregó en la puerta de su casa de Hurlingham, en su primera aparición pública tras el hallazgo del cuerpo de Candela. «No pude enterrar tranquila a mi hija. Me volvieron loca, fue todo una locura», expresó.
«No voy a parar hasta que aparezca el verdadero culpable, necesito que me traigan a los culpables», reiteró.
Desestimó que ella haya enviado presuntos «mensajes» a el o los secuestradores en sus apariciones ante la prensa mientras la niña estuvo en cautiverio. «No conozco a nadie y no di ningún mensaje, no puedo aportar información porque no sé nada. Hubiera sido la primera en ir a buscarla», concluyó.
Agregó que su marido «no tiene nada que ver» con lo sucedido con su hija.