Una bailarina en escena que vuelve a su cuerpo amo y esclavo se muestra “intervenida” por las exigencias personales y sociales del presente, haciendo foco en la imposición del éxito laboral. Lucía Berardo, la intérprete y autora de la obra La muerte del deseo, problematiza sobre la noción de deseo y se cuestiona si es un anhelo personal o una construcción social que deviene de mandatos.
Esos grandes interrogantes marcan el recorrido de esta propuesta escénica unipersonal que se conocerá este viernes en la sala local La Morada, y que aborda, al mismo tiempo, las problemáticas de género y el mercantilismo de los cuerpos en la sociedad heteropatriarcal capitalista de estos tiempos, del mismo modo que “refleja la angustia y los padecimientos de vivir en un mundo dominado por la heteronorma, por mandatos de productividad, éxito y autosuficiencia”.
Bajo la creación e interpretación de Lucía Berardo, la propuesta cuenta con la dirección de Emmanuel Calderón, al frente de un gran equipo artístico que completan Paula Luraschi en asistencia de dirección, con vestuario de Liza Tanoni, curaduría artística de David Berardo, luces de Paloma Gallardo, realización escenográfica de Augusto Selmo, diseño y realización de máscaras de Nicole Mazza, producción ejecutiva de Melisa Cañas, realización musical de Emmanuel Calderon junto a Nicolas Tognola, comunicación en redes de Susel Berardo y diseño gráfico de Mercedes Mansilla.
Sueños y pesadillas
La muerte del deseo es un unipersonal que habla sobre las autoexigencias de una bailarina performer trabajadora del arte y la cultura como tantas en Latinoamérica que derivan en autoexplotación. “Ella trabaja con su cuerpo, es una emprendedora del arte que se transforma en ama y esclava. Los mandatos, exigencias personales y sociales, sumados a la imposición del éxito laboral, profesional y artístico generan en ella presiones que se transforman en dolencias extremas en su cuerpo, lesiones múltiples y trastornos en el sueño como los terrores nocturnos, el sonambulismo y el insomnio”, adelantan desde el equipo creativo respecto de estas problemáticas aquí expresadas desde una poética de la escena.
Y completan: “A través de sus sueños, proyecta sus deseos, pero mueren cuando ella se despierta, a veces con un llanto desgarrador, angustiante, con el pulso por la nubes, y otras con una mueca o una sonrisa disfrazada. El espanto la abraza y le pregunta cuál es su deseo y cuánto está dispuesta a dar para conseguirlo”.
“La muerte del deseo es un unipersonal de danza y teatro físico, estructurado en siete escenas, que aborda el tema de la autoexigencia en la contemporaneidad, mostrando cómo esta autoexigencia y la necesidad de ir detrás de ese supuesto ideal, afectan a una bailarina en su vida cotidiana al punto de generarle dolencias en su cuerpo, lesiones y trastornos en el sueño”, contó el creador Emmanuel Calderón, uno de los referentes del grupo de creación colectiva e interdisciplinaria Urraka, creado en 2008 en San Fernando, provincia de Buenos Aires, y que llega hasta el presente con una gran producción que potencia saberes y conocimientos de todos sus integrantes que vienen de la plástica, la literatura, la música, el teatro y la danza, entre más.
“Este proyecto surge de una convocatoria abierta en Rosario de comienzos de este año; una residencia de creación que se hizo en el Centro Cultural Parque de España (Laboratorio y residencia de creación Descarriadas / las artes escénicas expandidas) que coordinó Marcel Allasino; de todos modos yo ya venía trabajando en Rosario por Urraka. Se trata de otro proyecto en desarrollo en El Jardín de los Niños (Tríptico de la Infancia), con el que aún estamos en proceso, y a partir de allí empecé a vincularme con la ciudad y con sus artistas”, sumó el creador.
“Pero este trabajo en particular, surge de la residencia de creación escénica del CCPE; me metí de lleno a trabajar en la dirección de este unipersonal que me tiene muy entusiasmado y emocionado. Estamos trabajando con un gran equipo de artistas de Rosario; y desde lo estético que aparece fuertemente en la obra, trabajamos con un artista plástico rosarino, David Berardo (destacado referente del hiperrealismo), que fue una gran guía en relación con el modo en el que se ve en la obra. Trabajamos mucho a partir de los concepto del expresionismo, y en ese sentido hay trazado en el espectáculo una línea que es bastante poderosa que luego completamos con cada uno de los integrantes del equipo”, planteó finalmente Calderón, uno de los referentes de su generación y destacado creador dentro de las propuestas que año tras año ofrece, entre otros, el Festival de Teatro de Rafaela.
Para agendar
La muerte del deseo se presentará este viernes 11 y el viernes 18 en la sala La Morada (San Martín 771 PA), a partir de las 21. Las entradas van de 1200 a 1800 pesos y se pueden adquirir por reserva previa al +54-3471 544741 o a través del IG de la obra: https://www.instagram.com/lmd.obra/