El gobernador Antonio Bonfatti defendió la actuación de sus funcionarios en la investigación del crimen del empresario Luis Medina, supuestamente vinculado con el narcotráfico, al sostener que la computadora de la víctima fue analizada «en cumplimiento de órdenes judiciales».
«Los funcionarios que abrieron la computadora particular de Medina lo hicieron en cumplimento de órdenes judiciales», manifestó el mandatario al referirse a la supuesta manipulación de una notebook de Medina por parte de personal dependiente del gobierno santafesino.
«Más allá de que la propia jueza que en teoría emitió esa instrucción (Raquel Cosgaya) lo negara públicamente. Nada se ha hecho al margen de las disposiciones del Poder Judicial y vamos a seguir en ese camino, respetando la división de poderes», remarcó.
En declaraciones al vespertino El Litoral, el gobernador se refirió también al allanamiento realizado por tres suboficiales de la División Judiciales de la Policía de Santa Fe el fin de semana pasado en el domicilio de Medina, situado en un country de la localidad bonaerense de Pilar. «Se deberán hacer cargo quienes hayan asumido una actitud sin conocimiento de la jueza. Los efectivos están en disponibilidad, porque no se ajustaron a derecho», explicó.
Por último, Bonfatti se pronunció a favor de la conformación de «un jury» contra la jueza renunciante María Luisa Pérez Vara, quien se encontraba de turno el 29 de diciembre pasado cuando asesinaron a Medina y de su pareja, María Pérez Castelli. La magistrada no se presentó en el lugar del hecho y tampoco atendió las llamadas de los funcionarios judiciales, como es obligación de los magistrados en turno.
En la madrugada de ese día Medina y su novia, la modelo Justine Fuster, de 23 años, fueron acribillados a balazos por personas que aún no han sido identificadas, cuando circulaban en un automóvil por Rosario.
